MADRID. El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha difundido, en un comunicado, los resultados de los análisis efectuados dentro del Plan Europeo para determinar el alcance del "fraude" en la venta de productos cárnicos, etiquetados como vacuno.

Un 4 % las 189 muestras examinadas por las autoridades sanitarias españolas tenían ADN de caballo sin indicar en la etiqueta, según los resultados remitidos a la Comisión Europea por este Departamento y por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

El Ministerio de Agricultura ha subrayado que, en el caso de las pruebas efectuadas para detectar el medicamento "fenilbutazona" -prohibido para animales destinados a consumo humano-, se analizaron 108 muestras "sin detectar ningún caso positivo".

Como consecuencia de los casos detectados desde mediados de enero de este año en Europa relacionados con practicas fraudulentas por presencia de ADN equino en productos cárnicos de vacuno, la Comisión Europea (CE) recomendó un plan coordinado de control para establecer la prevalencia de estas prácticas en el comercio de alimentos.

El plan se realizó durante el mes de marzo en los países comunitarios.

En España, hubo actuaciones coordinadas por parte de las autoridades de seguridad alimentaria, consumo y fraudes del Gobierno central y las Comunidades Autónomas.

Según la misma fuente, en España el número de análisis ha sido superior al que había determinado la Unión Europea (150).

En los casos que representan ese 4 % de equino no etiquetado, "se han adoptado las medidas oportunas por parte de las autoridades competentes para evitar que estos productos, con identificación incorrecta, continúen en el mercado", ha detallado el Ministerio.

Por otro lado, hay un seguimiento para la identificación del origen del presunto fraude.

Las muestras han sido analizadas en el Centro de Investigación de Control de la Calidad del Instituto Nacional de Consumo del Ministerio de Sanidad Servicios Sociales e Igualdad y en el Laboratorio Arbitral Agroalimentario, perteneciente al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

En cuanto a los controles para detectar la presencia de fenilbutazona -un antiinflamatorio veterinario utilizado en caballos destinados a deporte y silla o espectáculos, pero no a consumo humano- se han obtenido resultados negativos en el cien por cien de las muestras (108) analizadas en el Centro Nacional de Alimentación.