madrid. Las personas alérgicas sufrirán una primavera de alto riesgo ya que se prevé que la cantidad de pólenes de gramíneas se duplique con respecto a la del año anterior debido a la lluvia, la humedad y las temperaturas que se han registrado entre octubre y marzo. Esa es la conclusión a la que han llegado los especialistas de la Sociedad Español de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic), que ofrecieron ayer estas previsiones para una primavera en la que, no obstante, será determinante el tiempo que haga en mayo. Si en ese mes escasean las lluvias y las temperaturas son moderadas, la situación puede complicarse, según ha advertido el coordinador del Comité de Aerobiología de la Seaic, Francisco Feo. El modelo estadístico prevé para esta temporada 5.100 granos de gramíneas, casi el doble que en la primavera del año pasado (2.700 granos).