VITORIA. La negociación presupuestaria que ha concluido con un acuerdo entre el Partido Popular (PP) y el Partido Nacionalista Vasco (PNV) para asegurar las Cuentas municipales de Vitoria en 2013 estabilizará la gestión del equipo de gobierno y facilitará nuevas aportaciones en materia social y laboral, fundamentales en épocas como la actual, histórica por la crisis económica que todo lo envuelve y que hace sufrir tanto a tanta gente. Ese pacto, además, permitirá habilitar trabajos que redundarán en mejoras en materia de seguridad ciudadana. O, al menos, en materia de sensación de seguridad. En concreto, tal y como aportaron ayer a este diario fuentes del equipo de gobierno, en manos del PP, la nueva entente ha dado el plácet a una partida de 45.000 euros. La misma se utilizará para elaborar un trabajo aparte en el seno de la Ponencia encargada de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Vitoria, documento que guía el urbanismo a implementar en la ciudad. En concreto, la consigna presupuestaria, a ejecutarse durante este ejercicio con la colaboración del Departamento de Igualdad del Consistorio gasteiztarra, servirá para revisar urbanísticamente los lugares comunes que acumulan mayores recelos por parte de las vecinas de Gasteiz.

Será un hito que, quizás, sirva para apaciguar los recelos existentes hacia ciertos barrios y calles, que acumulan peticiones para cambiar o mejorar la iluminación, para eliminar setos, arbustos y similares o para facilitar un urbanismo más integrador y un diseño de distritos menos abierto que el que abunda hoy en los barrios de la expansión gasteiztarra.

En cualquier caso, las sensaciones de inseguridad llegan de la mano de datos que confirman todo lo contrario. Las agresiones sexuales no son delitos que abunden en la ciudad, aunque cuando se dan, crean un revuelo social importante. Al respecto, hay estadísticas que asustan, pero que con el matiz adecuado confirman las versiones oficiales. A finales del pasado año, y a falta de conocer las estadísticas completas del pasado ejercicio, la Fiscalía General del Estado apuntaba hace escasas fechas que a lo largo de 2011 se había detectado un incremento de un 187% en los delitos de agresión sexual en Álava. Según esos mismos datos, en esta provincia se observó un aumento de los delitos contra la libertad sexual del 56%. Sin embargo, el factor numérico engaña, ya que se partían de bases muy bajas. En cualquier caso, desde la Guardia Urbana se es categórico: su trabajo no confirma la existencia de puntos negros para la seguridad de las mujeres.