MADRID. Entre los secuestradores, se encuentra el propietario de la finca donde retuvieron al ciudadano secuestrado, originario de Bangladesh, y por el que exigieron por su liberación 4.000 euros a un familiar.
La víctima llevaba 48 horas en ropa interior, atado de pies y manos a una cama situada en el interior de un cobertizo, a temperaturas muy bajas, y con un vaso de agua y un trozo de pan como alimento.
Los hechos sucedieron el pasado jueves tras una denuncia interpuesta en una comisaría de Policía de Madrid, que ponía en conocimiento de los agentes el secuestro de un individuo. El denunciante, familiar de la víctima, manifestó que le habían solicitado 4.000 euros si quería volver a verlo.
Desde ese mismo momento los agentes comenzaron la investigación, y tras varias gestiones, constataron que el secuestrado se encontraba retenido en una finca situada en la madrileña localidad de Lozoyuela.
El pasado sábado, y tras establecer el correspondiente dispositivo operativo, el GEO asaltó la parcela y procedió a la detención de los tres secuestradores en la vivienda principal de la finca.
El secuestrado, muy asustado y sollozando, se encontraba en un cobertizo anexo a la edificación principal. Llevada 48 horas en ropa interior a temperaturas muy bajas atado de pies y manos a la cama y con un trozo de pan y un vaso de agua como alimento durante su cautiverio. Los agentes cortaron las cuerdas y le liberaron.
Los arrestados, entre ellos el propietario de la finca, secuestraron a la víctima el pasado día 8 para saldar una deuda económica y ya han sido puestos a disposición judicial.
La intervención ha sido llevada a cabo por agentes del grupo XII de la Brigada Provincial de Policía Judicial, pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, la sección de Secuestros y Extorsiones de la Comisaría General de Policía Judicial y el GEO-Grupo Especial de Operaciones.
