DONOSTIA. Un total de tres varones han sido detenidos como presuntos autores de un delito de malos tratos contra la mujer en Euskadi en las últimas horas. Los arrestos se han llevado a cabo en las localidades vizcainas de Gueñes, Elorrio y en la guipuzcoana de Tolosa, según ha informado el Departamento vasco de Interior.

El caso de mayor relevancia se registró sobre las tres y media de la tarde del domingo, en el barrio de Sodupe de Gueñes. A esa hora, agentes de la Ertzaintza se dirigieron a un domicilio de esta localidad tras recibir una llamada particular que informaba de una agresión sufrida por una mujer en el domicilio conyugal.

Personados en el lugar, los agentes procedieron a la detención de un varón de 76 años por agredir a su mujer mediante un puñetazo en el rostro y amenazar a sus hijos con dos cuchillos. El arrestado fue acusado de un presunto delito de violencia de género y otro de violencia doméstica.

El segundo caso del maltrato contra la mujer tuvo lugar a las cuatro y media de la tarde del domingo, en el municipio vizcaíno de Elorrio. Una mujer que se presentó en el domicilio de su expareja para tratar de asuntos personales fue agredida por el varón.

AGRESION

El hombre la agarró por el cuello hasta dejarla seminconsciente, profiriéndole varias patadas y arrojándola contra una mesa, momento en el que apareció un familiar de la víctima que facilitó la salida de la mujer del domicilio.

La víctima fue trasladada al hospital para una exploración exhaustiva por prescripción facultativa. Los agentes desplazados al lugar procedieron a la detención del presunto maltratador, de 44 años, por un presunto delito de violencia de género.

El tercer caso de violencia machista se registró sobre las diez y media de la noche en el municipio guipuzcoano de Tolosa. A esa hora, una patrulla de la Ertzaintza se desplazó hasta el apeadero de la calle Pablo Gorosabel ya que una mujer estaba siendo agredida por un varón.

Una vez en el lugar, los agentes observaron que un hombre tenía sujetada en el suelo a una mujer que se encontraba muy nerviosa. Los agentes separaron al varón de la mujer y comprobaron que la chica tenía la camisa rota y restos de sangre en la cabeza.

Tras hablar con la mujer y confirmar que había sido víctima de una agresión por parte de su pareja, los ertzainas detuvieron al joven, de 28 años, por un presunto delito de violencia de género.