Los estudiantes españoles utilizan métodos de protección en sus relaciones sexuales mayoritariamente (lo hace un 87,9% de ellos), pero todavía un 12,1% no los usa, mientras que un 11,7% practica la "marcha atrás". El método más usado es el preservativo (un 74%), en tanto que un 13,2% usa la píldora. Los profilácticos son los preferidos por los estudiantes de centros públicos (los usan el 75,6% de los matriculados en escuelas públicas frente al 72,1% de los estudiantes de las privadas). Sucede al revés con la píldora, que es preferida por los jóvenes que estudian en centros privados (13,9%) frente a los que acuden a centros públicos (12,9%).
