Madrid. Las Sociedades de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC) y de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) se mostraron ayer conformes con la lista de fármacos que Sanidad dejará de financiar, aunque sus expertos creen que habría que ampliar las excepciones.

El doctor José María Molero, miembro del Consejo Asesor de SEMFYC, señaló que, un elevado porcentaje de los medicamentos retirados "están considerados de utilidad terapéutica baja e, incluso, alguno de ellos nula". Añadió que "hay que priorizar y financiar aquellos fármacos que han demostrado que mejoran o curan determinados procesos". Por ese motivo, consideró que la medida "no va suponer una pérdida para médicos y pacientes".

Sin embargo, el representante de SEMFYC lamentó que no se hayan ampliado más las 97 excepciones que contempla el texto emitido por el Ministerio de Sanidad. A su juicio, en algunos pacientes que no están contemplados como excepciones, determinados medicamentos "tienen una utilidad terapéutica para calmar los síntomas" y puso como ejemplo los digestivos.

Por su parte, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria ya se mostró de acuerdo con la mayor parte del listado de medicamentos, pero desde el momento del anunció reclamó que para su dispensación en las farmacias siga siendo necesaria la supervisión y prescripción de un médico. Los médicos de atención primaria también consideran imprescindible que en algunas dolencias concretas, en las que se ha demostrado su eficacia, el fármaco desfinanciado pueda prescribirse con cargo al SNS.

Los médicos alertaron de la posibilidad de que la salida de la financiación pública de algunos de estos fármacos pueda originar una desviación de la prescripción hacia otro tipo de medicamentos más caros, como sucedió en el pasado, y que se asista a un trasvase de un grupo no financiado a otro.

Por ello, consideran necesario hacer un seguimiento del impacto de esta medida para detectar problemas que influyan en la salud de los pacientes crónicos.