GIRONA. El territorio afectado, "según el último cálculo provisional", es ligeramente inferior a las 14.000 hectáreas de las que se informaron en un principio, han señalado los bomberos en un comunicado.
Efectivos del cuerpo han revisado todo el perímetro afectado esta madrugada y "no han encontrado ningún punto caliente", por lo que ya no queda ningún vehículo trabajando sobre el terreno, han concretado.
El conseller de Interior, Felip Puig, y el de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural, Josep María Pelegrí, comparecen este lunes por la tarde en el Parlament para informar de la gestión de los incendios que han azotado desde el pasado domingo el Empordà.
Los dos incendios del Empordà, el que empezó en un aparcamiento de Le Perthus y el que se inició en la carretera N-260, han dejado un balance de cuatro muertos y seis heridos que siguen hospitalizados, además de 17 municipios afectados y cuantiosas pérdidas materiales y campos y bosques arrasados.
La peor tragedia la sufrió una familia francesa de Saint Avertin, en el departamento de Indre et Loire, en el centro de Francia; murieron el padre, Pascal C., de 43 años y su hija Oceanne, de 15 años, mientras que la madre, de 42, y un hijo de nueve siguen hospitalizados en el Hospital Josep Trueta de Girona, y una tercera hija, de 18 años, tuvo una fractura en el coxis.
La tragedia ocurrió cuando una veintena de coches que viajaban por la carretera N-260 se vieron atrapados por las llamas y las personas, presas del pánico, huyeron por los acantilados, y en total hubo una veintena de heridos.
Además, un vecino de Llers de 75 años murió cuando las llamas rodearon su masía y otro herido muy grave con el 80% del cuerpo quemado murió un día después en la Unidad de Quemados del Hospital Vall d'Hebrón.
Según la información de los Agentes Rurales, el posible origen de ambos incendios son dos colillas mal apagadas, una lanzada en la carretera N-260 y otra en el aparcamiento de Le Perthus, donde se encontraron centenares de colillas.
AYUDAS PREVISTAS
La Generalitat ha abierto líneas de ayuda para los afectados por los incendios, aunque todavía no hay una cifra cerrada ya que los ayuntamientos todavía no han empezado a evaluar los daños ocasionados.
La vicepresidenta del Govern, Joana Ortega, se reunió el viernes con 24 alcaldes de la zona afectada, y les indicó que la ventanilla única para canalizar todas las ayudas será el Consejo Comarcal del Alt Empordà.
Desde el departamento de Territorio y Vivienda se facilitarán un total de 57 viviendas gratuitas durante un año para todas aquellas familias que han perdido sus casas, -20 en Figueres, 14 en Llançà, 12 en Castellfollit de la Roca, una en la Bisbal d'Empordà, 4 en Sant Feliu de Guíxols, cinco en Santa Cristina d'Aro y una más en Les Preses-.