GASTEIZ. En un comunicado, Silvestre ha afirmado que la propuesta del ministro, con la que plantea eliminar la malformación del feto como causa de interrupción voluntaria del embarazo, "nos retrotrae a antes de la ley de 1985, que sí recogía dicho supuesto, y se justifica desde un discurso ideológico maniqueo, falso e hipócrita".
"La interrupción voluntaria del embarazo no es algo que se realice de forma frívola, irreflexiva y alegremente. Se trata de decisiones muy sopesadas y que responden a realidades personales, sociales y económica concretas", ha defendido.
Según Silvestre, "la legislación no establece la obligatoriedad del aborto, sino que plantea un marco normativo que hace posible su adopción con garantías sanitarias para las mujeres que deciden interrumpir un embarazo no deseado".
Asimismo, ha recordado que recoger en una Legislación el aborto de la mano de la educación sexual y reproductiva y de la generalización del uso de anticonceptivos es la principal aportación de la actual Ley española del aborto que entró en vigor el 5 de julio de 2010. "Se trata de una legislación avanzada, moderna y acorde con los acuerdos internacionales que velan por los derechos de las mujeres y de los menores", ha señalado.
En este sentido, ha indicado que el actual marco normativo es "acorde con las legislaciones más avanzadas en Europa y no supone un incremento en el número de abortos, sino la garantía de que cuando una mujer decide interrumpir un embarazo no deseado pueda hacerlo con garantías para su salud y sin sentirse una delincuente".
Silvestre ha subrayado que "la modificación de la ley que pretende Gallardón no sólo es ajena a la realidad social a la que debe dar respuesta, sino que criminaliza a las mujeres y retrotrae la consecución de los derechos de las mujeres en esta materia incluso a antes de 1985, cuando fue aprobada la primera ley del aborto en el Estado español".
"DISCURSO IDEOLOGICO"
Según ha declarado, "se trata de un discurso ideológico maniqueo y falso, que pretende hacernos creer que se está asesinando a niños indefensos y con algún tipo de discapacidad, cuando lo que la ley ofrece es la posibilidad de interrumpir un embarazo cuando la información médica disponible, basada en importantes avances médicos, nos realiza un diagnóstico temprano y fiable del estado del embarazo y del riesgo existente tanto para la madre como para el embrión".
Al respecto, ha defendido que el ministro "no puede utilizar la 'táctica del avestruz' para promover una modificación legislativa" y ha criticado que "pretende cambiar una ley que ha costado mucho promover y que los datos avalan como una buena ley". "Los abortos no dejarán de producirse y lo único que se conseguirá es que tan sólo puedan interrumpir los embarazos no deseados las mujeres con recursos económicos, sumiendo en la indefensión legislativa y en la penuria a otras muchas mujeres", ha advertido.
Finalmente, la directora de Emakunde ha denunciado que "el PP quiere que las mujeres no aborten, quiere que los jóvenes no reciban educación sexual y quiere que no se generalice el uso de los anticonceptivos". "Son tres hechos cuyo fatal impacto es la total indefensión de muchas mujeres en la libertad para tomar decisiones sobre su propio cuerpo", ha concluido.