DONOSTIA. El diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, y la directora de Derechos Humanos y Memoria Histórica, Marina Bidasoro, son los representantes del ente foral en esta ponencia, que ha fijado el mes de septiembre para la entrega de la evaluación que sus integrantes hagan sobre la situación que se vive en el territorio tras el anuncio de ETA de renunciar a la violencia.
La presidenta de la ponencia, la socialista Rafaela Romero, ha leído un breve texto consensuado a los medios de comunicación, en el que explican que en septiembre quieren contar con "un diagnóstico inicial, unos retos, unos objetivos y trabajos" que se vayan concretando en las sesiones posteriores.
La ponencia no celebrará ninguna reunión en los próximos dos meses, ya que sus integrantes dedicarán este tiempo a preparar esa evaluación, "un trabajo nada sencillo" que Romero ha agradecido a todos los integrantes de este nuevo órgano.
Las Juntas aprobaron el pasado día 11, con el apoyo de todos los grupos políticos, salvo el PP, que votó en contra, la creación de esta ponencia, dirigida a "contribuir a la humanización, la convivencia, la reconciliación social y la educación para la paz".
Idoia Ormazabal y Begoña Vesga son las representantes de Bildu en este foro, mientras que al PNV le representarán los junteros Markel Olano y Eider Mendoza; al PSE-EE Lore Suárez, además de Romero; y a Aralar Rebeka Ubera y Ernesto Merino.
El PP se opuso a su creación porque entiende que tendría que partir de la exigencia a ETA para que anunciara públicamente su disolución.
La procuradora popular Asunción Guerra argumentó que su grupo no desea ser "copartícipe en la confrontación de un relato que pretende desvirtuar la historia midiendo por el mismo rasero a víctimas y verdugos".