vitoria. El Pleno de las Juntas Generales de Álava realizó ayer un repaso exhaustivo de la situación energética del territorio histórico y la afección medioambiental que sobre él tienen o podrán tener distintos proyectos, como el de la extracción de hidrocarburos a través de un método como el fracking o los parques eólicos previstos. En ese sentido, y en relación a la técnica de fractura hidráulica para la extracción de gas no convencional, el procurador de Bildu, Luis Casado, instó a la diputada de Medio Ambiente y Urbanismo, Marta Ruiz, a que se posicionara acerca de las futuras exploraciones para observar la rentabilidad de este fin en los Montes de Vitoria. La responsable del área aseguró mantenerse "sin criterio" hasta que los estudios existentes pongan negro sobre blanco la conveniencia o no de esta práctica y de su uso para la explotación comercial de eventuales yacimientos. "Esta Diputación no dispone aún de los proyectos técnicos para ver si es compatible o no. Pero, en la medida que se demuestre que será perjudicial para Álava, me opondré", expresó Ruiz dejando las puertas abiertas a la realización de los sondeos.

Precisamente por esta indeterminación, Casado animó a la diputada a que se implicará en la protección de la cordillera amenazada por la presión energética y urbanística con la participación activa y conservacionista en la elaboración del Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN), que estipulará la protección real del futuro parque. "No parece que la Diputación Foral de Álava tenga una voz y un criterio", le reprochó.

Por otro lado, la diputada de Medio Ambiente y Urbanismo, Marta Ruiz, intentó tranquilizar ayer los ánimos de aquellos defensores de las energías renovables. Después de la aprobación del nuevo marco regulatorio creado por el Real Decreto Ley 1/2012 que elimina varias partidas dedicadas a este sector, el grupo juntero del Partido Socialista de Euskadi (PSE) interrogó a la responsable foral del área acerca de las implicaciones para el territorio histórico.

Plan Mugarri Ruiz aseguró que "la mayoría del Plan Mugarri no se verá afectado". Pero lo cierto es que no pudo evitar asumir que habrá ciertos proyectos que no gozarán del mismo impulso que en los últimos años. Así las cosas, la inversiones realizadas en huertos solares y proyectos de biomasa se verán más que afectados por la transformación de la regulación. Es decir, un mazazo para ambas modalidades energéticas, que tendrán que buscar nuevas vías de financiación para salir adelante.

Aún así, la diputada foral de Medio Ambiente aseguró que esto no evitará que se continúen con los proyectos piloto que se incluyen en el Plan Mugarri en múltiples vertientes ni en los proyectos que ya se encuentran en marcha en el territorio histórico. De esta forma, aseguró, por ejemplo, que el proyecto de plantación de sumideros de dióxido de carbono en diversos polígonos aprobados en 2011, dotado con 138.000 euros, y la instalación de un miniparque eólico en la planta de envases de Jundiz, apoyado con una partida de 38.000 euros, seguirán el proceso de ejecución diseñado en su momento.