DONOSTIA. En una rueda de prensa celebrada en Donostia, la presidenta de la asociación, Flor Díaz, acompañada de la portavoz, Marian Zubia, y de los afectados por el presunto robo de bebés Merche Aizpurua y Jesús Lizaso, ha apuntado que ya no quiere "salir en la foto con nadie si no se hace nada" y ha aseverado que se les está "acabando la paciencia".

En este sentido ha denunciado que al menos más de 200 familias afectadas, un tercio de sus socios, tienen "dificultades para acceder a su documentación en centros hospitalarios de Euskadi" y eso "a pesar de las promesas del Gobierno" vasco. "Todos dicen palabras bonitas, pero no hacen nada", ha añadido Zubia.

Asimismo, Díaz ha destacado que "el hecho de no disponer de documentación acrecienta el drama ya que muchas madres no pueden siquiera certificar que dieron a luz", lo que lleva a que muchas denuncias se archiven por falta de pruebas.

La presidenta de SOS Bebés Robados ha señalado que muchas de las clínicas siguen en activo y otras desaparecieron en los años 80-90, por lo que "alguien tiene que saber donde están los historiales, tiene que haber algún responsable".

Según la información que manejan desde la asociación, el territorio guipuzcoano es el que registra el dato más alto, son 144 familias las que no disponen de documentación.

En Bizkaia ascienden a 75 y el Alava, con un total de 98 supuestos casos, la asociación no cuenta con ninguna familia afectada sin documentación, ya que todos los historiales solicitados han sido aportados por los correspondientes centros sanitarios.

Finalmente, Zubia ha criticado que desde los centros sanitarios les están "tomando por el pito del sereno", esperando que se cansen, pero ha asegurado que no se van a cansar. "A día de hoy estamos igual que al principio, por no decir peor", ha concluido Díaz.