Vitoria. La escuela vasca no está dispuesta a bajar el listón. La fórmula: conseguir que la red pública sea realmente un territorio libre de recortes y reformas ajenas a sus buenos resultados. La escuela pública vasca -familias, profesionales y directores- aboga por profundizar en la senda abierta por el Currículum Vasco -con el euskera como lengua "de uso preferente" y multilingüe- y reforzar la financiación. Todo ello con el fin de colocar la enseñanza ante "un nuevo paradigma" que acerque Euskadi a los países de referencia, frente a iniciativas gubernamentales de uno u otro signo, de Gasteiz o Madrid, que solo aportan inestabilidad al sistema educativo y merman su calidad.

En este contexto nace el documento Euskal Eskola Publikoa, Haratago, la hoja de ruta para de la educación vasca del futuro y que ayer presentaron públicamente la Confederación de Padres y Madres (EHIGE), que agrupa al 90% de las AMPAs, la asociación de directores BIHE con representación en más de 100 institutos de Secundaria y SAREAN, una red de profesionales de 178 centros públicos de Infantil y Primaria.

El presidente de BIHE, Josu Etxaburu, manifestó que "evidentemente hay que blindar la enseñanza frente a los recortes así como ante las reformas de los sucesivos gobiernos" ya que "cuando llega uno al Gobierno parece que necesita imponer su impronta personal y, la verdad, esto no ayuda en exceso a la educación". Desde su punto de vista, "todos los cambios que lleguen vía decreto y leyes no le han dado nunca tranquilidad al sistema educativo, ni se lo van a dar en este momento". El portavoz del grupo firmante de Euskal Eskola Publikoa, Haratago conminó al Gobierno vasco a que deje de deshojar la margarita y anuncie si va a aplicar los recortes aprobados por el Gobierno español -ratios, sustituciones etc- y las reformas que el Ministerio de Juan Ignacio Wert está esbozando como la reforma de Secundaria, las nuevas condiciones de acceso a las becas o negar el título de ESO a quien no pase limpio el ciclo de Secundaria. "Nos consta que están preocupados y dándole vueltas al tema, pero nos gustaría reunirnos en un futuro muy próximo con el Gobierno vasco para saber cómo van a aplicar lo anunciado, ya que el curso escolar 2012-2013 está llamando a la puerta, y todo va a tener que hacerse en quince días".

Hoja de ruta Con la presentación de su documento la comunidad escolar demostró ayer que la escuela pública vasca está, o debería estar, por encima las eventuales crisis. No en vano, el texto de 43 folios de extensión, define los trazos más importantes de las acciones educativas que deben abordar los centros educativos públicos para garantizar el mejor servicio posible a partir del análisis de la realidad.

En primer lugar, Etxaburu destacó dos: declarar difunto el modelo A "ya que incumple sistemáticamente la ley en materia lingüística" y garantizar el bilingüismo para seguir avanzando hacia el plurilingüismo "ya que somos conscientes de que nuestro alumnado deberá desenvolverse fuera de nuestras fronteras". En segundo término, el portavoz de BIHE aludió a la financiación y renovación de las infraestructuras para paliar un parque obsoleto. El documento afirma que el Gobierno Vasco debe mejorar el nivel de inversiones actual para Educación, situando el porcentaje del PIB al nivel de los países más desarrollados de nuestro entorno. "La educación pública debe tener un modelo de financiación específico, suficiente para responder a los retos y demandas reales que se planteen en los centros públicos". Etxaburu señaló que "es urgente la definición de un plan extraordinario de construcción de nuevos centros públicos, que responda al crecimiento de la demanda de plazas públicas".