MADRID. Así concluye un estudio realizado por el Servicio de Neumología del Hospital de Jerez sobre el asma vinculado a la satisfacción sexual de las mujeres, del que ha informado hoy la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
El estudio, que será presentado en el 45º Congreso Nacional de la SEPAR en Madrid entre los días 8 y 11 de junio, se refiere a uno de los asuntos que preocupan más a las mujeres que sufren asma severo, porque afecta a su vida diaria.
Les preocupa porque la limitación para la actividad sexual es la tercera dificultad más frecuente que sufren los enfermos de asma, después de problemas como subir escaleras o realizar tareas domésticas.
El coito en este tipo de enfermos puede desencadenar una agudización severa del asma que requiera acudir a urgencias, hospitalización o incluso ventilación asistida.
Para muchos de los pacientes los esfuerzos físicos que acompañan al sexo pueden llevarles a un episodio asmático, pero incluso para algunos la mera excitación sexual ya puede resultar suficiente para provocar o agravar el padecimiento previo.
Por ello, los especialistas, como el doctor José Gregorio Soto, miembro del área de asma de SEPAR, recomiendan tomar un medicamento broncodilatador prescrito antes de tener relaciones íntimas, porque "podría ayudar a las personas con asma a sobrellevar estas dificultades sexuales, de modo similar a lo que ocurre en otros asmáticos que lo toman antes de otros tipos de actividad física".
El seguimiento del tratamiento prescrito también puede ayudar a controlar y paliar los síntomas generales de la enfermedad, pero además es esencial que los pacientes se alejen de los factores desencadenantes, como los alérgenos.
Para trabajar frente a esta problemática, los especialistas han llegado a un consenso sobre los criterios diagnósticos de la disfunción sexual en las mujeres.
Sobre los varones estudiados, se advierte que también se ve afectada la función eréctil, así como otros aspectos influyentes en una vida sexual satisfactoria.
