intimidatoria o preventiva. Que patrulle en vehículos a motor o a pie. De barrio o repartida por toda la ciudad. El debate sobre el modelo de Policía Local en Vitoria se remonta a muchos años atrás y nunca se ha logrado un consenso político al respecto. La tensión dentro de la plantilla de Aguirrelanda, las divergencias con los responsables municipales y la distancia entre agentes y Jefatura han marcado durante demasiado tiempo el devenir del cuerpo, por no hablar de la profunda inquietud que suscita entre el grueso de los patrulleros el hecho de que el Ayuntamiento no convoque concursos oposición para conceder las plazas en propiedad y siga echando mano de las comisiones de servicios, auténticos parches en opinión de muchos. La Guardia Urbana de la capital alavesa demanda desesperadamente estabilidad y el Gabinete Maroto parece dispuesto a coger el toro por los cuernos. Ayer, mientras el alcalde recorría por la mañana las dependencias de Aguirrelanda junto al comisario jefe, José Carlos García Marcos, la concejal de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos, participaba en una ponencia sobre Policía Local celebrada -a instancias de Bildu- en el Ayuntamiento. Cada grupo político acudió a la reunión con una serie de ideas, líneas generales, que definen su idea de cómo debe operar el cuerpo. En el plazo de tres meses se consensuarán todas ellas y se añadirán otras que aportará la ciudadanía de Gasteiz, a través de los consejos sectoriales y territoriales, y los propios agentes. Cada dos semanas, sus integrantes se encontrarán para ir definiendo el modelo definitivo a aplicar. Ha llegado la hora de decidir el futuro de la Policía Local.

Dentro de esta ponencia, la concejal socialista Marian Gutiérrez ejercerá de presidenta. Su grupo acudió ayer a la reunión pertrechado con tres líneas fundamentales de trabajo bajo el brazo. La primera de ellas solicita que se abra una vía para que la ciudadanía de Vitoria pueda hacer llegar a la clase política qué tipo de Policía Municipal desea. Una propuesta que también tiene en cuenta la opinión de los propios agentes. También pusieron sobre la mesa la conveniencia de que la plantilla en general se especialice en ciertos aspectos -como la violencia de género- y que, paralelamente, algunas unidades hagan lo propio con otro tipo de asuntos, como los robos en interior de coches o el tráfico de estupefacientes. Finalmente, el PSE animó ayer al Ayuntamiento a analizar las campañas preventivas de información llevadas a cabo hasta la fecha en materia de seguridad, decidir cuáles deben reeditarse y qué prioridades establecer dentro de este campo.

Blanca Guinea, edil del PNV, concretó ayer que el leit motiv de la ponencia es determinar "cómo se aplican las competencias que la Policía Local tiene encomendadas por Ley". "Para nosotros es muy importante que pivote mucho sobre la prevención y la cercanía", precisó.

Aprovechando la presencia de la responsable de Seguridad Ciudadana, el PNV solicitó ayer que se entregue a los grupos la documentación necesaria para establecer un dictamen previo que permita redefinir el cuerpo. "La concejal planteó en su momento un proceso participativo, con el que estamos de acuerdo y que entendemos que debe estar incluido en la ponencia, y ya entonces habló de un diagnóstico. Por eso le hemos pedido que nos presente dicho diagnóstico", indicó Guinea.

Para establecer este punto de partida, el grupo jeltzale ha pedido que se le remita la memoria policial correspondiente a 2011, el actual organigrama, los protocolos de actuación aprobados y los acuerdos de coordinación que la Guardia Urbana mantiene con otros cuerpos de seguridad.

"En cualquiera de los casos -agregó Guinea-, entendemos que el trabajo que se haga tiene que contar con la participación de la propia Policía y con la opinión de la ciudadanía, bien a nivel particular o del movimiento asociativo. Las asociaciones, a través de los consejos sectoriales y territoriales, pueden realizar sus aportaciones".

Bildu también presentó su paquete de propuestas. La concejal de la coalición abertzale Iratxe López de Aberasturi, presente en la ponencia, explicó que una de sus prioridades es que se fomente el patrullaje a pie y en bicicleta durante todo el año. "Da una mayor sensación de cercanía, así que nos parece fundamental. Y aunque en Gasteiz hace bastante frío, creemos que se puede patrullar en bicicleta todo el año siempre que se vaya bien equipado. No pedimos que toda la plantilla camine o vaya en bicicleta. Quien por su trabajo tenga que ir en coche o en moto, que lo haga", explicó.

En el apartado de la identificación de los agentes, Bildu solicita que aquellos que hablen euskera porten un distintivo para que la ciudadanía pueda dirigirse a ellos en esta lengua. Además, para la Policía de barrio estiman oportuno que lleven su nombre a la vista para que los vecinos puedan hablar con ellos de una forma más directa.

Sin entrar aún a debatir aspectos técnicos, el grupo también insta a los agentes encargados de desempeñar tareas de control en montes y zonas verdes que los vehículos ejerzan el menor impacto contaminante posible sobre el medio ambiente.

En cuanto a la violencia de género, Bildu considera que cualquier agresión que sufra una mujer, proceda de su pareja, su expareja o de cualquier otra persona, debe ser catalogada como violencia de género. "Al mismo tiempo solicitamos que en el intervalo entre la denuncia y la celebración del juicio, las mujeres que lo soliciten puedan contar con el acompañamiento de un agente local", indicó López de Aberasturi.

Finalmente, en lo que a aportaciones a la ponencia se refiere, la coalición propone que los sindicatos representados (ELA, CCOO y SIPLA) y los no representados (LAB Udaltzaingoa y ErNE), se sumen a las próximas reuniones.

La idea que Marian Castellanos ha transmitido desde que fuera nombrada concejala de Seguridad Ciudadana transita por la misma línea de cercanía y prevención que plantean los grupos, así que todo parece indicar que habrá acuerdo en ese sentido. Igualmente ha mostrado su disposición al patrullaje a pie a la hora de crear el Grupo de Prevención y Apoyo -sustituto de la Unidad Operativa de Seguridad- y su predilección por la prevención antes que por la intimidación.

la plantilla Mientras tanto, los integrantes de la plantilla se formulan la gran pregunta. ¿Cuándo se van a convocar concursos oposición para que los agentes primeros, oficiales y suboficiales obtengan las plazas en propiedad? El sistema de comisión de servicios (se asciende transitoriamente a un agente por encima de su nivel real pero puede perder la plaza cuando los responsables así lo decidan) les genera inestabilidad, lo cual deriva en un menor grado de implicación. Este problema de fondo se ha convertido en toda una tradición hasta el punto de que uno de los subcomisarios lleva en comisión de servicios durante dos décadas. En 2011 se sacaron algunas plazas a concurso, pero el proceso no acabó de cuajar salvo en el caso de los agentes primeros, que pasaron de seis a ocho y todos ellos en propiedad. De los cuatro aspirantes a oficial, ninguno aprobó y el anunciado concurso para subcomisario nunca se llegó a convocar. De hecho, la actual plaza de comisario jefe se ocupa en comisión de servicios, al igual que sucediera con sus dos predecesores en el cargo.