vitoria. El sindicato STEE-EILAS ha criticado que el Plan Estratégico de Atención a la Diversidad presentado por el Ejecutivo autonómico no aborde la cuestión del reparto del alumnado inmigrante, un viejo problema que arrastra Euskadi, y en especial Vitoria. La capital alavesa concentra la mayoría de los centros educativos vascos -hasta media docena- en riesgo de sufrir procesos de guetización.
La central sindical, mayoritaria entre los profesores, recuerda que cualquier colegio "sostenido con dinero público" debe contribuir a buscar la integración a través de una planificación adecuada. En este sentido, apunta indirectamente a la red concertada, que escolariza a menos del 30% del alumnado inmigrante. "Resulta necesario que intervenga la Administración para evitar la segregación por cuestiones de origen o de nivel económico", insiste. STEE-EILAS recuerda, asimismo, que el modelo A es también un foco de atracción para los estudiantes que proceden de fuera, que son derivados directamente a aulas de castellano. "La segregación en función de la lengua nos parece igualmente inaceptable, hay que aprovechar la oportunidad que nos da el euskera para la cohesión social y la integración", añaden.
El reparto equitativo de los estudiantes extranjeros es un viejo debate que el Gobierno Vasco no termina de abordar. Si hace unos años se llegó a hablar seriamente de la posibilidad de establecer cupos por cada centro, nunca han llegado a prosperar iniciativas de este tipo. El Departamento vasco de Educación reconoce que aún no ha dado con la fórmula para que no se perpetúe el histórico desequilibrio.
Cabe recordar que en Euskadi se tiene constancia de que en doce centros los extranjeros superan en número al alumnado autóctono. Seis de ellos están en Vitoria y gozan de tasas de concentración que duplican e incluso triplican las recomendadas por los expertos. Es el caso de Santa María (75%), Los Herrán (68%), Divino Maestro (61%), San Ignacio (57%), Judimendi (52%) y también Samaniego (52%).