Un joven apuñala tres veces a su madre y muere al tirarse por la ventana en Sestao

Sestao. El barrio sestaotarra de Aceta-Miramar lindante con Portugalete se volvió a estremecer al conocer la noticia de que un joven vecino de la localidad, en "tratamiento psicológico", apuñaló en tres ocasiones a su madre dejándola malherida. Después, al ver a su madre tendida en el suelo envuelta en sangre, decidió quitarse la vida tirándose por la ventana de su domicilio.

Los hechos que conmocionaron ayer a la localidad de Sestao sucedieron en torno a las 09.00 horas en el cuarto piso del número 4 de la calle Aceta. El agresor, un joven de 23 años identificado como G.S., cogió un cuchillo y apuñaló a su madre hasta en tres ocasiones. La mujer cayó al suelo malherida y sangrando abundantemente. Al percatarse de lo que acababa de suceder el joven saltó por la ventana. A pesar de que se trataba de un cuarto piso, la ventana desde la que se precipitó al vacío, y que da a la calle Txabarri, equivale a un octavo piso, por lo que G.S. falleció en el acto. En cuanto a la víctima, de las tres cuchilladas recibidas a manos de su propio hijo, la de mayor gravedad, le alcanzó en el costado. Los sanitarios que la atendieron en el lugar trataron de detener la hemorragia. A pesar de sus intentos, no consiguieron que la mujer dejara de sangrar por lo que tuvo que ser trasladada al hospital de Cruces donde fue operada de urgencia para "salvar su vida", tal y como señaló el alcalde de Sestao, Josu Bergara. Afortunadamente, la operación concluyó con éxito y, al cierre de esta edición, la mujer se recuperaba de sus lesiones en la planta de cirugía del citado centro sanitario.

Incredulidad Éste era el sentimiento que los vecinos y conocidos de la víctima y del agresor expresaban ayer. Nadie podía entender cómo un joven, "aparentemente normal", había podido cometer un acto "tan brutal" como este. Y es que, G.S. "nunca ha montado escándalos en el vecindario ni ha tenido ningún enfrentamiento con ningún vecino", decía desconcertada un vecina.

"Conozco al chico desde que era pequeño y a su familia mucho antes. No me lo explico, le ha tenido que dar algo porque es un chico muy normal, muy sano, salía como cualquier joven de su edad y no tenía problemas", argumentaba una conocida de la familia. Los que conocían a esta familia aseguran que se trataba de "una familia normal". Además del joven fallecido, la víctima y su marido tenían otros dos hijos. "Una chica de unos 20 años, que estudia en Madrid, y un niño más pequeño. Son una familia como cualquiera nunca se les ha oído un escándalo", resaltaba una vecina.

Comportamiento extraño Todo parece apuntar a que el joven padecía algún tipo de trastorno mental. Incluso algunas voces apuntan a que G.S. estuvo ingresado varias veces en la unidad de psiquiatría de algún centro sanitario. Asimismo, según ha podido saber este periódico, el joven fallecido protagonizó anteriormente situaciones incoherentes y "comportamientos extraños".

Al parecer en varias ocasiones se presentó en las dependencias de la Policía Local de Sestao afirmando que "alguien le había usurpado su personalidad y su identidad y que utilizaban su DNI para realizar algún tipo de transacción". Según narraron las mismas fuentes, después de tales afirmaciones, el joven "salía corriendo sin ofrecer ninguna explicación". Estas mismas fuentes reconocieron que, en muchas ocasiones, la madre del joven disculpaba su comportamiento asegurando que seguía un tratamiento para paliar los síntomas de su enfermedad mental.