vitoria. Poco ha durado en su integridad uno de los experimentos estrella en materia policial del anterior Ejecutivo gasteiztarra. Tanto como el éxito que ha cosechado la comisaría de la Policía Municipal abierta en el Casco Viejo por el gabinete del socialista Patxi Lazcoz. Un edificio que se presuponía decisivo a la hora de contribuir a mejorar el clima de inseguridad de la colina medieval, sobretodo, durante las noches de los fines de semana, cuando el barrio se transforma en uno de los focos más importantes del ocio nocturno de la capital alavesa, ha registrado entre el 1 de enero y el 31 de octubre de este año 2011 apenas 41 denuncias durante las noches de los viernes, sábados y vísperas de festivo. Por este motivo, el actual equipo de gobierno popular ha decidido cerrar el recurso durante estas jornadas. A cambio, los agentes responsables de atender la oficina pasarán a patrullar las calles.
Así lo explicó ayer la concejal de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos, a instancias del grupo municipal del PNV. La representante del PP anunció en la Comisión de Políticas Sociales que la comisaría del Casco Viejo "dejará de prestar servicio durante las noches de los fines de semana" a partir de este próximo viernes. A cambio, la edil prevé "ganar en seguridad" para los vecinos de la zona con la presencia de esos dos agentes que, hasta ahora, se encargaban de atender la comisaría durante ese turno. Según los datos aportados por Castellanos, los atestados instruidos en la comisaría de la discordia entre enero y octubre se quedan muy lejos de los tramitados entre semana en horario de mañana y tarde. 233 denuncias en el primer caso y 244 en el segundo. Según la concejal, tal situación acarrea un coste "innecesario" y difícil de encajar en unas arcas municipales famélicas por la crisis. No en vano, el precio por mantener abiertas las dependencias en horario nocturno supone 600,30 euros por denuncia, sin contar los derivados del mantenimiento del edificio y los gastos corrientes de agua, luz, calefacción u ordenadores, entre otros, "lo que hace insostenible la permanencia de este servicio".
Lo que no va a desaparecer, sin embargo, será la unidad UOS de la Policía Municipal, a la que el Consistorio popular prevé dotar de una formación específica de la que carecía hasta la fecha, tal y como informó Castellanos, que también quiso descartar problemas entre la plantilla de la Guardia Urbana y su nueva jefatura.
Violencia de género En otro orden de cosas, Castellanos detalló que el servicio municipal de acompañamiento a las víctimas de violencia de género seguirá cumpliendo su función a partir de ahora pese a que la Ertzaintza también va a comenzar a prestar un servicio similar. La representante popular, también en respuesta al PNV, destacó que en lo que va de 2011 la Policía Local ha atendido a 91 mujeres tras sufrir ataques machistas, ha detenido a 51 personas e imputado a otras 38 debido a este tipo de episodios y ha realizado 121 acompañamientos a féminas.