Sevilla. El abuelo y los padres de Marta del Castillo acudieron ayer a la Audiencia Provincial de Sevilla, donde tuvo lugar la primera sesión del juicio de la joven desaparecida. "Esperamos poco, pero confiamos en la justicia y en que se vengan abajo", aseguró el abuelo de Marta, José Antonio Casanueva.
La primera sesión del juicio, que juzga a los cuatro imputados por el crimen de la joven sevillana, dio por levantada la primera sesión a las 12.30 horas, apenas dos horas después de haber comenzado, tras escuchar las cuestiones previas planteadas por ambas partes. Los familiares se encuentran a la espera de una valoración más amplia, que tendrá lugar en la sesión de hoy, donde se prevén las audiciones de las escuchas telefónicas.
Los padres de Marta acogieron con "cautela" la primera sesión del juicio, dado que "no ha habido ninguna novedad". La madre de la menor, Eva Casanueva, explicó que los familiares no pueden entrar en la sala hasta que no se produzca su declaración como testigos, por lo que "nos hemos enterado de lo sucedido más por los medios que otra cosa". Asimismo, han calificado de "importante" la declaración del comisario jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía, Manuel Piedrabuena, que ha sido solicitada por su representación jurídica al considerar que puede aportar una visión "conjunta" de lo sucedido.
Primera jornada "tranquila" Por su parte, el padre de Marta, Antonio del Castillo, respecto a un posible cruce con los acusados en el caso, especificó que "hemos estado apartados y aislados de todo". Tras sus declaraciones iniciales, en las que señalaba que la familia había hecho un "acto de fe" y no descartaba un nuevo cambio de versión del principal acusado, Miguel Carcaño, el abuelo de Marta, José Antonio Casanueva, calificó de "tranquila" la primera jornada del proceso judicial. "Cada parte ha hecho sus peticiones, aunque se han registrado algunas contradicciones", indicó Casanueva, que recordó que, al margen de la declaración de Piedrabuena, también se ha solicitado que comparezcan algunos testigos más, entre ellos el presidente de la comunidad de propietarios de León XIII. Acerca del asesino confeso agregó que, "de Carcaño no espero nada, es una alimaña".
El abuelo de la joven recibió muestras de apoyo ciudadano por parte de personas congregadas tras las vallas del espacio delimitado para los periodistas. De las escasas personas que había a primera hora de la mañana, se pasó a cerca de medio centenar al mediodía, con varias decenas de miembros de la plataforma Marta del Castillo reunidos a las puertas de los juzgados. La masa humana se dispersó hacia las 13.00 horas, una vez que el juicio ya había sido suspendido para tratar las primeras cuestiones.