Una mujer falleció este viernes en Orán, en Argelia, debido a las graves quemaduras de tercer grado ocasionadas al prenderse fuego a lo bonzo, junto a su hijo de tres años, en protesta por la orden de desahucio que le había sido notificada. En el momento del ataque, un policía intentó razonar con ella, pero la joven, G. Mama, consiguió prenderse fuego. Las llamas afectaron, además, a su hijo de tres años y al agente, que sufren quemaduras de segundo grado. Mama compró la casa a una mujer divorciada, pero su exmarido denunció el hecho ante los tribunales porque aún era propietario de parte de la vivienda. La justicia le dio finalmente la razón, por lo que ordenó el desahucio de la nueva propietaria.
