berlín. Un cura católico de la ciudad germana de Salzgitter ha reconocido haber abusado sexualmente durante años de tres menores, según informó ayer la Fiscalía de Braunschweig, en el estado federado de Baja Sajonia (norte del país), que investiga si hay más víctimas.

A finales de junio, la madre de uno de los niños, que al comienzo de los abusos en 2004 tenía 10 años, denunció al religioso, detenido el sábado poco antes de partir a unas colonias. Otras dos víctimas confirmaron ayer las declaraciones del cura, según las cuales abusó de ellos desde 2004 y 2007, respectivamente, durante unos dos años.

Mientras, la Policía de Braunschweig aludió a "numerosos casos" cometidos "con regularidad". La Fiscalía señaló que el cura, de 46 años, está en contacto frecuente con menores, como en las clases de catequesis para la primera comunión.

El viernes, los investigadores se incautaron en el domicilio del religioso de un ordenador y documentos con el fin de establecer si existen indicios de contacto con otros niños. La Fiscalía no precisó si entre los objetos decomisados hay también pornografía infantil.

En tanto, el religioso permanece en prisión preventiva ante el riesgo de reincidir y fue suspendido ayer por el obispado. Según el obispo de Hildesheim, Heinz-Günter Bongartz, la investigación eclesiástica determinará si el cura debe abandonar el sacerdocio de forma definitiva. "En primer lugar estoy pensando en las víctimas", subrayó.

El obispado de Hildesheim, que dijo estar "sorprendido y abatido", reconoció que ya hace un año el religioso había sido acusado por "supuesto acercamiento excesivo a una tercera persona", pero la Fiscalía no halló indicios suficientes.

Por otra parte, la Fiscalía puntualizó que la muerte de un joven que se disparó un tiro en el apartamento del cura en 2007 no tiene relación con las acusaciones de abusos sexuales.