llodio. El sol fue uno de los protagonistas indiscutibles en la XXXI edición de la fiesta de las ikastolas alavesas que, por cuarta vez en sus 40 años de historia, organizó Laudio Ikastola. Miles de personas se acercaron desde todas las partes de la geografía euskaldun dispuestas a disfrutar de una jornada plenamente en euskera, invadiendo de forma literal el centro urbano de la segunda localidad alavesa. La fiesta arrancó en las alturas del barrio de Galmaka -ubicación del primer intento de ikastola, de la mano de la familia Errazti- a donde también fueron cientos las personas que encaminaron sus pasos para inaugurar el recorrido.

Entre ellas el exlehendakari y laudioarra, Juan José Ibarretxe, así como un sinfín de personalidades del mundo de la política vasca, encabezadas por el diputado general de Álava en funciones, Xabier Agirre, y la consejera de Educación, Isabel Celaá, que aprovechó su discurso para reivindicar un sistema educativo trilingüe en el que se respete la diversidad ideológica.

Celaá aseguró haber acudido a la cita "para firmar nuestro proceso de modernización del sistema educativo y para agradecer a las ikastolas el trabajo de estos dos últimos años, a la par que para insistir en la necesidad de trabajar más las Ciencias, porque así surgirán nuevos investigadores y gente preparada para que no nos vuelva a coger una crisis".

En este sentido, la consejera también pidió que las aulas se conviertan en "nido para el desarrollo de la ciencia y la investigación", así como en un espacio que "cobije una convivencia pacífica y democrática", porque las escuelas deben ser "además de la caja de la memoria, la casa de la habitabilidad para educar ciudadanos", manifestó, insistiendo en que las escuelas sean un lugar en el que se respete la diversidad de ideologías, de pensamiento y de sentimientos de identidad, para lo que pidió un "esfuerzo especial" para que los niños y jóvenes "sean capaces de desarrollar una firme actitud ética".

Durante su intervención, en euskera, la consejera defendió "abrir las ventanas de los centros educativos a la enseñanza del inglés" desde la base del bilingüismo para que las tres lenguas "no sean rivales sino aliadas". También destacó el proceso de modernización tecnológica que se está llevando a cabo en las aulas y alabó la disposición "abierta y favorable al diálogo y al acuerdo" de los responsables de los centros.

Celaá también hizo una breve alusión a los recortes presupuestarios que han afectado a los centros públicos y aseguró ser consciente "de que no han sido del agrado de nadie", aunque señaló que han sido "imprescindibles" para mantener el equilibrio de las cuentas públicas. Por su parte, Agirre -que no sólo completó los cuatro kilómetros del recorrido, sino que además tuvo la energía suficiente para, tras subir el empinado acceso a la ikastola, bailar una jota a ritmo de trikitixas y panderos, acompañado por la diputada de Cultura, Malentxo Arruabarrena- animó a todos los asistentes a disfrutar de la fiesta en euskera porque "somos un pueblo porque tenemos una lengua".