Vitoria. Del cuartelillo a la cárcel. Ayer entró en prisión por orden del juez el regente del bar de El Pilar detenido este lunes junto a otros dos individuos -uno de ellos agente municipal- en un operación antidroga en la que se decomisaron alrededor de 640 gramos de cocaína y 75 de hachís; en metálico, unos 39.000 euros en el mercado ilícito.
A lo largo del último mes, agentes de la Unidad de Investigación de la Comisaría de Vitoria venían desarrollando una investigación relacionada con el tráfico de sustancias estupefacientes, centrada en un local hostelero del barrio de El Pilar. Un trabajo que fructificó este pasado lunes. Alrededor de las 22.15 horas, durante las tareas de vigilancia que se estaban llevando a cabo para detener a los presuntos narcos, se pudo constatar cómo dos de las personas investigadas se encontraban en la calle Honduras, en plena vía pública, para lo que podía ser una cita de compra-venta de droga de cierta importancia.
Ante esta situación, ambas fueron interceptadas y a una de ellas se le ocupó medio kilo de cocaína, en roca, que portaba en una bolsa. La droga incautada tendría un valor cercano a los 30.000 euros en el mercado. Media hora más tarde, en un bar de la zona regentado por uno de los arrestados, era detenido un miembro de la Policía Local de Vitoria, implicado en estas actividades ilícitas.
En el registro de este establecimiento efectuado este martes, en el que participó la Unidad Canina de la Ertzaintza, se encontraron 136 gramos de cocaína de gran pureza, 75 gramos de hachís y otras pequeñas cantidades de cocaína preparadas para su venta, valorado todo en unos 9.000 euros.
Los hallazgos resultaron ser lo suficientemente contundentes como para que los tres detenidos, de 35, 47 y 49 años respectivamente, pasaran este miércoles a disposición judicial, decretando el juez el ingreso en prisión del propietario del bar, quien tenía antecedentes por tráfico de drogas.
Tras tener conocimiento de esta operación, el Departamento municipal de Función Pública del Ayuntamiento abrió un expediente temporal y suspendió de empleo y sueldo al agente implicado a la espera de que se demuestre o no su culpabilidad. De esta forma, el gabinete de Patxi Lazcoz trató de mostrar su "absoluto respeto" a este proceso, aunque al mismo tiempo remarcó el derecho a la presunción de inocencia del detenido hasta que no haya una condena en firme.
Los esfuerzos policiales por cercenar las vías de entrada de los estupefacientes en el territorio histórico dan cada vez dan más resultados. Sin embargo, no siempre es posible evitar el acceso, por lo que se hace fundamental concentrar esfuerzos contra el menudeo en bares y locales hosteleros con investigaciones y múltiples redadas. En los últimos meses, la atención de los agentes se ha centrado en establecimientos de barrios consolidados de la capital alavesa, como Zaramaga, Casco Viejo, Coronación y El Pilar, entre otros.
Eso sí, lo que no es tan habitual es que el detenido lleve el mismo uniforme que los investigadores, como ha sucedido en esta última operación. Un golpe que no ayuda precisamente a mejorar la imagen del Cuerpo.