vitoria. El consejero de Vivienda, Iñaki Arriola, ha reconocido que va a ser "difícil" edificar los pisos protegidos, en especial en régimen de alquiler, previstos en el Plan Director de Vivienda y Regeneración Urbana 2010-2013, con la actual dotación presupuestaria de 1.389 millones de euros. Un recorte que afectaría en concreto a las 8.100 viviendas de arrendamiento proyectadas, según anunció Arriola durante su intervención en el pleno celebrado ayer en el Parlamento Vasco a instancias de Aralar, EB, UPyD y EA,
El consejero culpó a la actual coyuntura económica de que la puesta en marcha de nuevas promociones, especialmente en alquiler, "se ve seriamente dificultada porque el Gobierno, con su exclusiva dotación presupuestaria, tiene una capacidad limitada de producción por la imposibilidad de movilizar fondos privados", lo que impidió el pasado año poner en marcha 1.600 pisos con destino al alquiler.
Para poder contar con financiación añadida, Arriola explicó que ha puesto en marcha tanto la venta del suelo de la viviendas protegidas a sus adjudicatarios, como el proceso para tratar de captar dinero proveniente de fondos exteriores, de inversión y de programas europeos.
En este sentido, el consejero señaló que está en contacto, entre otros, con el Banco Europeo de Inversiones, para tratar de cerrar acuerdos que "permitan llevar a cabo los compromisos del Plan Director en esta legislatura, sin que ello suponga un endeudamiento inasumible para el Gobierno". En relación al anteproyecto de Ley de Vivienda, pide a los grupos que "tengan cintura" para negociarlo cuando llegue al Parlamento Vasco "sin apriorismos de antemano".
Los grupos parlamentarios no se quedaron impasibles ante estas declaraciones. Desde el PNV, Juan Antonio Arieta-Araunabeina criticó que el Plan Director "es papel mojado", al no cumplir los objetivos. El socialista Jesús Loza, defendió que la promoción de vivienda pública necesita de la colaboración de los agentes privados, mientras que la popular Esther Martínez, opinó que con "una mala Ley del Suelo es difícil tener una buena política de vivienda". Dani Maeztu, de Aralar, al igual que EB, denunció que el Departamento, en lugar de incentivar las políticas públicas de vivienda, "tiene la tendencia de potenciar más el mercado privado"
Gorka Maneiro (UPyD), exigió un mayor compromiso público y presupuestario, al igual que el "cambio profundo" en la orientación de la política de vivienda que solicitó Juango Agirrezabala (EA).