Vitoria. Las diferentes explicaciones ofrecidas por el encarecimiento de las facturas de gas sólo han dejado claro que no hay una razón aparente que justifique que todas las quejas sean de clientes de Repsol, ya que el combustible se ha encarecido un 12-14%.

De hecho, la compañía aún insiste en que el encarecimiento de los recibos se debe a un aumento del consumo, unido al incremento del precio del combustible. Para ello, ha remitido a los demandantes una simulación de la factura con el consumo registrado durante los meses de diciembre y enero, pero aplicando los mismos precios que el año pasado, con el fin de convencer a los usuarios de que no se trata de ningún error de facturación ni de lectura de contador. Sin embargo, los afectados siguen sin explicarse cómo Repsol ha podido detectar un aumento de consumo, cuando el invierno ha sido más cálido que el de 2009. De hecho, según la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, se han registrado de media temperaturas de dos grados superiores a las de la temporada anterior.

El Gobierno Vasco, por su parte, salió hace escasos días a la palestra para defenderse de las declaraciones forales que acusan a la mala calidad del combustible como la única causa posible para el inexplicable fenómeno. En un comunicado, el Departamento de Industria explicaba que tras las pruebas, análisis y muestras realizadas se concluyó que no había indicios de que la empresa haya cometido ningún error en el cobro de los recibos a los usuarios de la zona rural. Además, instaba a la Diputación a que "deponga su actitud irresponsable y deje de crear alarma social en el asunto".

El Gobierno foral por el momento no ha respondido a Lakua, aunque siguen sin convencerles que los elevados pagos a los que tienen que hacer frente cerca de 15.000 alaveses sea sólo una consecuencia del aumento del propano.

Un motivo que llevó al Palacio de la Provincia a solicitar cinco catas para tratar de averiguar si la calidad del propano está relacionada con el encarecimiento de este servicio, aunque dos de ellas ya habían sido recargadas por lo que no se podía hacer el análisis en el material original. El Gobierno foral ha conseguido la disposición por parte de la compañía para hacer la investigación en depósitos que aún conservan el combustible original. Así se lo trasladó un responsable de Repsol en una reunión mantenida recientemente con el diputado de Administración Local y Equilibrio Territorial, Iñaki Nafarrate, que no da por buenas las explicaciones trasladadas por el Gobierno Vasco, que atribuye lo sucedido a la subida del precio del gas. De hecho, esta misma semana el Ejecutivo autonómico ha decidido dar por cerrada la polémica creada en torno al incremento de las facturas de propano.

La polémica suscitada en torno al cobro de los recibos además de este enfrentamiento de carácter político ha enfadado, aún más, a los vecinos afectados. En concreto, a la Asociación de Concejos (ACOA) ya que denunció el miércoles que la Diputación alavesa les "ignora" en el asunto de las supuestas irregularidades cometidas por Repsol en la facturación del gas propano, después de que el diputado de Administración Local y Equilibrio Territorial, Iñaki Nafarrate, haya anunciado una reunión con los alcaldes de los municipios afectados a la que no han sido invitados los responsables de los concejos.

ACOA denunció que, "nuevamente, Nafarrate ha decidido ignorar a los concejos pese a su interés, ya que es precisamente en los concejos donde mayoritariamente residen los afectados por las facturas".