amurrio. Ya es una realidad. El parque eólico de Jesuri, entre los términos municipales de Llodio y Orozko, cuenta desde el martes con la declaración de impacto ambiental favorable, tal y como se recoge en el Boletín Oficial del País Vasco. Por lo tanto, la empresa Guascor podrá levantar ocho molinos, que ocuparán dieciséis hectáreas que se dedican al cultivo de pinos, explotaciones forestales y pastizales. Los molinos tendrán una potencia unitaria de 2.300 kilovatios, una altura de 126,5 metros, y permitirá al parque producir 18,4 megavatios.
Conocida la noticia, las reacciones de la plataforma ecologista Zanpazu Bizirik y la de clubes de montaña de la zona, como Mendiko Lagunak de Amurrio, no se han hecho esperar y han remitido un comunicado en el que no sólo expresan su rechazo a la materialización del proyecto, sino que también anuncian movilizaciones que, en las próximas semanas, se concretarán en una salida al monte afectado y unas charlas informativas.
"Lo más denigrante de todo este proyecto, y con ello no sólo nos referimos a Jesuri, sino a todo el proceso de implantación de la energía eólica en Euskal Herria, no es ya que hagan caso omiso a las leyes y ética ambiental, sino la manera en la que la participación ciudadana está siendo marginada. Se han realizado esfuerzos por diferentes colectivos, así como a nivel personal. Ejemplo claro de ellos son las alegaciones presentadas en los diferentes sectores. Y todos estos esfuerzos se han dejado en el olvido, obviando la ley 27/2006 de participación ambiental", argumentan.
Derecho de información La plataforma creada en el valle de Ayala añade que los ciudadanos tienen el derecho de información que en el caso del plan eólico vasco "no se está respetando. Y es por eso, por la falta de información, tanto positiva como negativa, y más importante aún, verdadera, que tan poca gente se decanta o a favor o en contra del proyecto. Lo mismo sucede con otras infraestructuras que se están construyendo en Euskal Herria. No se puede estar a favor o en contra de algo que desconoces".
En este sentido, apuntan que la gran mayoría de las centrales eólicas proyectadas se encuentran en territorio alavés y en zonas montañosas poco conocidas. Y se preguntan, "¿qué sucedería si quisieran construir la central eólica de Jesuri en el Gorbea? Pregunta sin respuesta, como tantas otras que rodean a este fantasma disfrazado de lobby industrial que si no logramos parar va a acabar con los últimos reductos de montañas que nos quedan", insisten.
Por ello, consideran que es muy importante que "el pueblo, la gente que disfruta del monte y de los lugares que van a ser destruidos, los grupos de montaña, los ayuntamientos y los partidos políticos se movilicen, en este caso, contra de la construcción de la central eólica de Jesuri". El proyecto -que afectará a suelo del barrio laudioarra de Gardea a la hora de conducir la electricidad de forma soterrada- contempla, en concreto, la instalación de ocho aerogeneradores que se elevarán a más de 80 metros de altura y el presupuesto estimado de la inversión es de 21,6 millones de euros.