vitoria. El Departamento de Industria descartó ayer que existan errores en la facturación del suministro del gas propano en varios municipios de Álava, a raíz de las quejas que se habían suscitado en este sentido, aunque el informe que investiga esta cuestión aún no ha concluido. En un comunicado, el Departamento de Industria avanzó ayer las conclusiones del estudio, a falta de su cierre definitivo, y subrayó que no ha observado irregularidades en los contadores, ni errores administrativos en la facturación del gas.
Una de las localidades alavesas de la que han partido las quejas que han dado pie a este estudio es Labastida y la empresa que ha sido investigada es Repsol. La firma ha facilitado al Ejecutivo autonómico todos los datos que se le han reclamado, con la evolución en la facturación y el consumo de los usuarios correspondientes. El Gobierno Vasco los ha comparado con los de otros operadores para comprobar las cuantías y los consumos facturados en situaciones análogas, sin que haya detectado por ahora anomalías.
En el caso de Labastida, algunos usuarios habían denunciado subidas de entorno al 45% o incluso superiores. Industria les ha recordado que en la facturación del gas propano han podido incidir el aumento del precio del gas, el incremento del IVA y el consumo de cada cliente, el cual puede ser controlado a través de los contadores.
En cuanto al consumo, consideró que el clima puede ser un factor a tener en cuenta, ya que "su comportamiento ha sido diferente en los meses de la facturación y en comparación con años anteriores". Con respecto a las quejas por una posible baja calidad del suministro, Industria ha explicado que ha repasado controles y certificados de calidad realizados sobre el gas que se distribuye desde el mismo origen, no solo a Álava, sino también a otros territorios del norte de España. Tras estas comprobaciones y otras más, el Departamento de Industria ha asegurado que "no ha detectado ningún error administrativo en la facturción por parte de Repsol a sus clientes, ni tampoco irregularidades en los contadores, ni deficiencias en la calidad del gas suministrado".
control de riego Por otra parte, el Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario, Neiker- Tecnalia, y la Ingeniería Arson informaron ayer de que han creado un sistema de telecontrol de riego en Álava que, comparado con los métodos tradicionales, permitirá ahorrar hasta un 20%de agua en cada cosecha. Con esta tecnología, se controlan de manera centralizada la programación de los turnos de riego y los consumos de cada regante, lo que permite una gestión basada en criterios hidráulicos y energéticos que incrementan la eficiencia del riego, según señaló el Departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco. Los datos proporcionados por el telecontrol son aprovechados para detección de averías hidráulicas y para el manejo agronómico de las fincas. La tecnología del sistema permite la formación de una red de unidades remotas que se conectan mediante comunicaciones inalámbricas con un centro de control que se encarga de la gestión del riego.