Idoia Alonso

Bilbao. "Educación muestra su satisfacción por la normalidad con la que se han desarrollado las elecciones [?] reitera su disposición permanente de diálogo y búsqueda de acuerdos". Ésta es la lectura que el Departamento de Educación realizó el día después de que la comunidad educativa propinase un severo correctivo en las urnas a CCOO Irakaskuntza, por haber acompañado las políticas del Gabinete de Isabel Celaá. Cabe recordar que el miércoles LAB arrebató a CCOO su larga hegemonía en la enseñanza Obligatoria así como en la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), mientras que STEE-EILAS se convirtió en la central mayoritaria entre el colectivo más numeroso en la escuela: el profesorado. El neutro comunicado de ayer contrasta, sin embargo, con el diagnóstico unánime lanzado por la oposición y la mayoría sindical.

"El castigo no sólo es para CCOO y UGT, que también; el verdadero castigo es el que ha sufrido la consejera, que es la verdadera perdedora de estas elecciones".

Esta frase de Juanjo Agirrezabala (EA) expresa el sentir mayoritario expresado la noche de los comicios por LAB, STEE-EILAS y ELA. Un análisis al que ayer se adhirieron Eusko Alkartasuna, PNV y Aralar. Según Mikel Basabe, responsable de Educación de Aralar, detrás del ascenso de la mayoría sindical vasca "hay una crítica a las formas y los contenidos de la política que está desarrollando la Consejería que dirige Isabel Celaá".

A su juicio, "es evidente que el Departamento de Educación está trabajando mucho en temas concretos, vinculados con la identidad, y que lo está haciendo de espaldas a la comunidad educativa. Por tanto, Basabe consideró que "el recado que los miembros de la comunidad educativa a Celaá y CCOO es claro". No a un sindicato que ha formado en minoría un convenio colectivo del que se han derivado claros retrocesos en materia laboral: recorte de plantillas y sueldos. Y no a una central que secunda los planes estrella de la consejera -Plan de Convivencia, Marco de Educación Trilingüe y Eskola 2.0- que han sido lanzados sin consenso o consulta previa. Para el PNV, los resultados del miércoles responden a que los agentes educativos "han padecido demasiadas veces" la política derivada del pacto PP-PSE. En su dinámica legitimación, el Departamento ha llegado incluso a poner bajo sospecha a docentes, direcciones de los centros tanto en la cuestión de las matriculaciones como durante la reforma del Currículum Vasco, cuando Celaá dijo aquello del adoctrinamiento nacionalista", aseguró la jeltzale Arantza Aurrekoetxea. "Quieras que no, Celaá ha puesto bajo sospecha a todo el sector de este país durante los últimos 30 años", matizó.

Responsables de los sindicatos ELA, LAB y STEE-EILAS. Foto: DNA