BILBAO. Los hechos ocurrieron sobre las 12:30 horas de ayer, cuando la policía acudió al hospital tras un aviso del servicio de seguridad del Hospital de Cruces que alertaba de un altercado protagonizado por un paciente.
Al parecer, este hombre, que se encontraba ingresado en una de las plantas del hospital, había amenazado e insultado a una auxiliar de enfermería tras llamarle ésta la atención por fumar.
Al llegar la patrulla policial, el paciente adoptó una actitud agresiva con los agentes y tuvo que ser reducido y detenido.
El arrestado, que no tenía antecedentes policiales, recibió el alta médica para poder ser trasladado a la comisaría y hoy pasará a disposición judicial.