Vitoria. La plataforma con personas con discapacidad de Álava reivindica hoy, Día internacional de los Derechos Humanos, que las instituciones dejen de tratarles como "ciudadanos de segunda". La agrupación exige que los mandatarios se pongan manos a la obra para derribar los "obstáculos de todo tipo" que les impiden una vida plena en la capital alavesa: desde las discriminaciones laborales, las de vivienda, de equipamiento urbano, transporte público o de instalaciones de ocio. Una larga lista de barreras arquitectónicas que prueba la asistencia que este colectivo necesita para moverse por la ciudad en pleno siglo XXI. Estos impedimentos se concretarán más a las 19.00 horas de esta tarde, en la Casa de Cultura de la Florida. En la biblioteca de este centro se organiza la charla-debate Derechos Humanos y discapacidad aquí y ahora, en la que Arantza Basagoiti, miembro de la citada plataforma y del Comité de Ética de Álava, será la encargada de guiar esta reflexión bajo una idea única: las necesidades fundamentales de las personas, los derechos universales, no se deben cubrir desde lo privado, sino desde lo público.
Y es ahí donde es necesario coger las herramientas que logren derrumbar las barreras mentales. "Lo que se conoce como discapacidad es una cuestión política y ahí somos responsables de exigir a las instituciones la igualdad real de todas las personas que vivimos en Vitoria", critica la declaración que realiza esta agrupación con motivo de esta jornada.
El colectivo pone en tela de juicio que la actitud ejemplar de la capital alavesa en materia de medio ambiente, tras ser nombrada Green Capital, no se traslade a su ciudadanía. "Reclamamos una ciudad sensible y sensibilizada con la calidad de vida de las personas. Vitoria debe dejar de tratarnos a las personas con discapacidad como ciudadanos de segunda", demanda esta agrupación que no quiere una actuación paternalista ni asistencial, sino "reclamar sólo lo que nos corresponde por derecho".
A su juicio, que muchos de los integrantes de la plataforma necesiten ayuda para desplazarse con seguridad por la capital alavesa, "no debe ser razón para que no tengamos derecho a las mismas oportunidades que el resto del vecindario para disfrutar de los bienes y servicios de la capital", critican.