vitoria. Rafael Bengoa ha tratado de minimizar las consecuencias de las informaciones sobre las contrataciones de su departamento con la vieja estrategia de dar la callada por respuesta. Pero le ha servido de poco porque la presión de los partidos ha ido en aumento a medida que pasaban los días sin que explicara a fondo las controvertidas adjudicaciones relacionadas con altos cargos de su consejería.

PNV y EA solicitaron desde el principio la comparecencia del consejero en el Parlamento Vasco. El PP también pidió, tímidamente, explicaciones aunque con el paso de los días la contundencia en la reclamación es mayor. El viernes, la parlamentaria popular Laura Garrido instaba al actual gobierno a "dejarlo todo claro y despejar las dudas", porque se debe "separar claramente" el ámbito público del privado para "no generar confusión" en la contratación de servicios públicos. Y es que Bengoa se ha limitado a decir que está "vacunado contra las difamaciones", en alusión a la serie de informaciones contrastadas publicadas por DNA.

Con todo, el consejero se verá obligado, en las próximas semanas, a dar una explicación a las adjudicaciones que están en el punto de mira de todos. Según ha revelado este medio, el Departamento de Sanidad y Osakidetza han adjudicado al menos cuatro contratos en menos de un año a dos empresas relacionadas con Pablo Arbeloa López, director gerente de Osatek, y con Paloma Acevedo, directora general de Farmacia, ambos altos cargos nombrados por Bengoa el año pasado.

Estas dos personas, a través de sus sociedades y antes de acceder al Gobierno Vasco, eran accionistas de Plaold, consultoría sanitaria cuyo nombre comercial es Innovasalud. Más en concreto, Arbeloa era uno de los administradores de la empresa. Con el objetivo de cumplir la Ley de Contratos del Sector Público, ambos vendieron la mayor parte de sus acciones antes de acceder a sus puestos en la Administración pública. No obstante, cada uno de ellos decidió mantener algo más del 4% de participaciones, según confirmaron fuentes del Departamento de Sanidad a este medio. De esa manera, se aseguraban de que no incurrían en incompatibilidad.

Sanidad también contrató en una ocasión, al menos, a una segunda sociedad, Indesis, accionista a su vez de Plaold, y a la que Arbeloa y Acevedo vendieron la mayor parte de sus participaciones. Se da la circunstancia de que estas dos empresas no habían sido contratadas previamente por la Sanidad pública vasca antes de la llegada de Bengoa al Gobierno Vasco.

La relación del actual consejero y de su viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández, con Arbeloa no comenzó cuando éste llegó a la dirección de Osatek, hace ahora un año. En 2002, B&F Gestión y Salud, la consultoría fundada cinco años antes por Bengoa y Fernández, nombró a Arbeloa apoderado de la sociedad y, un año más tarde, administrador único. Empresas sanitarias consultadas aseguran que Bengoa y Fernández habrían vendido a Arbeloa su sociedad, B&F Gestión y Salud, en 2004. Ese mismo año, según consta en el Registro Mercantil, el domicilio social de B&F se traslada a Getxo, a la residencia de Arbeloa, que también figura como sede social de Plaold y de Inqual XXI, esta última empresa propiedad del actual director de Osatek. Desde esa fecha no hay nuevos registros referidos a B&F, aunque consta que ha tenido ingresos hasta 2009, como mínimo.

Tras la publicación de estas informaciones, el propio Pablo Arbeloa aseguró que no tenía intereses en las empresas salvo una participación "marginal" y que no había tenido nada que ver con los contratos. En un correo electrónico remitido a los trabajadores de Osatek a principios de esta semana, manifestó que no pedirá "disculpas" porque no se siente "responsable de nada".

La portavoz del Gobierno Vasco, Idoia Mendia, defendió la conducta "irreprochable" de los dos altos cargos, que "cumplen" con la legalidad vigente. También sostuvo que se está tratando de poner "una cortina de humo" sobre el caso Margüello, aunque matizó que no tenía nada que ver con este. A diferencia del doctor José Carlos Margüello, que no tenía capacidad de contratación en el Hospital de Cruces, Pablo Arbeloa, desde su cargo al frente de Osatek, aprueba adjudicaciones como la reciente de la plataforma multicanal, por un valor de 12 millones de euros.