La empresa petrolera BP debe llevar a cabo aún una última prueba de presión antes de dar por sellado definitivamente el pozo Macondo en el golfo de México, responsable del peor vertido de crudo en la historia de EEUU, que comenzó hace cinco meses. Según informó hoy la compañía, la inyección de cemento desde el pozo auxiliar que empezó el viernes ha concluido y el cemento ha cuajado. Ahora es necesario llevar a cabo una prueba para determinar si el cemento resiste la presión. Si se determina el éxito de la prueba, se podrá dar oficialmente por extinguido el pozo, cinco meses después de que comenzara el vertido.