Logroño. El principal grupo bodeguero que existe en el marco de la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja, en la que se encuentran los mejores caldos del territorio histórico, criticó ayer las "acusaciones falaces que no se corresponden con la realidad" y que "dañan" el prestigio de los caldos con el sello Rioja. Con esas palabras, el sector bodeguero quiso salir al paso de las declaraciones, manifestaciones y protestas de los agricultores, que no entienden cómo es posible que el montante que les pagan por sus uvas haya caído por debajo del precio de coste y que, sin embargo, los caldos sigan con las mismas tarifas en los puntos de venta.
El director general del denominado Grupo Rioja -que engloba a los grandes grupos bodegueros del ámbito del Rioja-, José Luis Benítez, destacó ayer en Logroño que "estamos muy preocupados por la imagen que se transmite del sector vinícola en general y de las bodegas en particular", y lamentó que "da la sensación de que se quiere enfrentar a dos sectores", en alusión a productores y comercializadores. No obstante esa situación "no supone que no haya puntos de vista diferentes", sobre todo, en un momento de "una crisis de consumo brutal, que se está prolongando desde hace dos años". En ese sentido, añadió que aunque las ventas de vino han crecido "lo han hecho con una caída de precios, se vende más a costa de sacrificio en la rentabilidad, no ganamos más".
Para el portavoz del Grupo Rioja, el negocio del vino "es a largo plazo" y por ello "no se puede medir la rentabilidad en dos o tres años, sino con una serie mucho más larga" y "aunque los precios de la uva hayan bajado, que sean ruinosos es otra cosa".
En su intervención recordó que la pasada campaña las bodegas del Grupo Rioja liquidaron la uva a los agricultores a 55 céntimos por kilo de media, aunque, en cualquier caso, si hay bodegas que pagaron menos o que vayan a hacerlo este año "se trata de un acuerdo entre particulares. Es un mercado libre nos guste o no". Por ello recalcó que "no tenemos una previsión de precios, marcar un mínimo sería ilegal, salvo que se cambie la Ley" y ante esta situación, "sólo podemos recomendar a los socios que se respete un precio por encima de los costes de producción".
"Está bien reclamar un precio digno. Nosotros también lo queremos para el vino, pero sobre ese coste de producción de un kilogramo de uva nadie ha puesto ni un papel sobre la mesa", aseguró y acusó a algunas organizaciones agrarias de "no trabajar lo suficiente en busca de un acuerdo". De hecho, matizó, se han convocado cuatro reuniones en busca de un acuerdo "y en una de ellas, al final de julio, algunas asociaciones que critican ni fueron. Ya basta de demagogia barata y de querer hacer que las bodegas sean las malas, lo que hay que hacer es estar donde hay que trabajar", concluyó Benítez.
El Grupo Rioja es la mayor asociación que agrupa a las mayores bodegas, entre ellas a las alavesas Campillo, Domecq, Faustino, Marqués de Riscal, Izadi, Marqués de Carrión, Marqués de Vitoria, Ysios, El Coto de Rioja, Solar de Samaniego y Remélluri. El presidente del grupo es Victor Pascual, que a su vez, lo es también del Consejo Regulador y de la Interprofesional del Vino de Rioja.
