Laguardia. La directora de orquesta Inma Shara, pregonera de la XVII edición de la Fiesta de la Vendimia de Rioja Alavesa, proclamó ayer dos formas artísticas de entender la vida, la música clásica y el vino. "La armonía es la base y la esencia del éxito que nace del esfuerzo individual, de la pasión y de la motivación de todos". Recordó cómo combate la nostalgia de su tierra alavesa cuando viaja afirmando que "es en los restaurantes donde esa sed se ve satisfecha al ver vinos de Rioja Alavesa en sus cartas".

Shara describió que "detrás del telón de la puesta en escena de un gran caldo son muchos los esfuerzos que se esconden, muchas las ilusiones que emanan de la propia "orquesta", llamada bodega, muchos los infinitos ensayos que se llevan a cabo hasta que esta gran obra de arte llamada vino se presenta en el escenario de la realidad para dar lo mejor de sí misma, por y para el público, siempre para el público, al igual que en el mundo de la orquesta sinfónica".

La pregonera matizó que "en el mundo del arte de hacer buen vino y en el de interpretar la buena música, la armonía es la base y la esencia del éxito que nace del esfuerzo individual, de la pasión y de la motivación de todos y cada uno de los profesores que integran una orquesta, que conforman y dan vida a una bodega. Somos una gran familia, sois una gran familia, pequeñas individualidades artísticas que formáis un todo reconociendo los intereses como intereses comunes, sois un gran organismo humano, vivo, que creáis, creamos, que dais y damos vida a una obra de arte con suma ilusión, sin escatimar esfuerzos cada tarde, cada día, para ver nacer la gran sinfonía, el gran vino".

Su intervención terminó con un "os deseo el mejor de los conciertos para este año 2010, y que la recolección permita crear, a través de la armonía y el esfuerzo de todas las personas que tanta ilusión ponen año tras año, verdaderas obras maestras".

Antes del pregón la alcaldesa de Laguardia, María Jesús Amelibia, ofreció la fiesta a "las mujeres y hombres viticultoras y viticultores, en estos momentos de incertidumbre". Recordó como ésta es la fiesta donde los riojanoalaveses muestran su orgullo de tierra, "una tierra y unas viñas que trabajaron nuestros padres y queremos dejarlas a nuestros hijos". Por ello pidió a las instituciones unidad para salir de la situación que se vive en el sector de la uva y del vino, "que logren con su presión que cuando se habla de precios dignos sean dignos de verdad".

Tomando como referencias los vehículos aparcados y el número de copas vendidas, se puede cifrar entre 18.0000 y 20.000 los visitantes a esta fiesta itinerante por toda la comarca. Entre otros invitados estuvieron el lehendakari, Patxi López; y el diputado general de Álava, Xabier Agirre, entre otros.

La fiesta comenzó a las once de la mañana con la interpretación de danzas de la comarca a cargo de varios grupos llegados de diversas localidades de Rioja Alavesa. A esa hora, sin embargo, ya era casi imposible acceder al lugar donde se iba a celebrar el acto institucional y continuaban llegando más visitantes. Tal fue la avalancha de gente que Laguardia, que tiene un gran problema con los aparcamientos, tuvo que habilitar parcelas algo alejadas del casco urbano para que funcionasen como estacionamientos.

A las once y media, ya con todos los invitados en el escenario, dio comienzo el acto institucional y, tras el pregón de Inma Shara, se procedió por parte de niños representantes de cada uno de los núcleos de Rioja Alavesa a llevar hasta la tina los racimos de uvas que debían ser pisados para extraer el primer mosto del año con el que brindar por una buena vendimia… Y eso pese a que las perspectivas en cuanto a rentabilidad estén bajo negros nubarrones este ejercicio.

A partir de ese momento se oficializó la apertura de los numerosos txokos que se distribuían por toda la villa. Los stands de los ayuntamientos y uno de las juntas administrativas se extendían por la muralla exterior y subían por el paseo de El Collado. Mientras, los artesanos se instalaron en los alrededores de la iglesia de San Juan. Frente a la Torre Abacial se acondicionó un espacio para la comida popular y, en los alrededores de la principal puerta de la muralla, se colocaron los artesanos agroalimentarios con aceite de Rioja Alavesa, embutidos, panadería y bollería y varios lugares donde, aparte de mostrar productos, se podía consumir pollos de corral asados o bocadillos. Incluso, algunos restaurantes -que ayer estuvieron a tope- instalaron mostradores en el exterior de sus establecimientos con bocadillos y bebidas para poder atender la enorme cantidad de visitantes a la villa. Sin embargo, el stand más singular fue el del Casino virtual del Vino, instalado bajo los soportales del Ayuntamiento, donde en vez de fichas había botellas de vino. Con ellas se jugaba para conocer un poco mejor Rioja Alavesa. Al final de la mañana, en medio de una algarabía tremenda, se sortearon vinos, viajes y estancias entre el público que había acudido.

Superado el ecuador de la jornada, la alcaldesa de Laguardia, María Jesús Amelibia, valoraba muy positivamente el esfuerzo realizado por el personal del Ayuntamiento y los numerosos voluntarios que aportaron lo mejor del carácter hospitalario que tienen los vecinos de Laguardia para hacer agradable y cómoda la presencia de visitantes. Ellos fueron los responsables de la canalización del tráfico de vehículos y personas, la venta de tiques para retirar la copa de vino y los vales de consumición y de algunos de los stands.

La tarde fue ya más tranquila, permitiendo a quienes se quedaron, y fueron muchos, el paseo más sosegado por los puestos y el poteo por los establecimientos. La jornada se cerró con un concierto de la Agrupación Musical de la villa y con el traspaso de la responsabilidad de empezar a organizar la próxima edición, que será en Oion, donde ya se celebró en el año 1995.