El precio de la uva es la principal reivindicación de los productores. Durante la pasada campaña se pagaron precios irrisorios de 0,35 y 0,45 céntimos por kilo de uva, que puede ser rentable cuando en una hectárea se vendimian 10.000 kilos "pero no en el "Rioja", donde los rendimientos son de 5.800 kilos", según apuntaba ayer uno de los sindicalistas, quien apostó por un precio de partida de 0,55 céntimos, cifra muy lejana a la que, por ejemplo, está dispuesto a pagar una de las "grandes", CVNE, que las pagó en 2009 a 0,35 y que ya ha anunciado una rebaja para este año. Peor lo tienen algunos agricultores de Elciego, donde la bodega Domecq ha cambiado de propietario y se ha comunicado a los suministradores de uva que no las iban a coger. En ese sentido, Eduardo Jalón denunció a Marqués de Riscal y a Bodegas Muriel por querer "aprovecharse de la crisis económica para pagar la bodega". Mientras, los sindicalistas hablaban de otras necesidades para reflotar al sector productor, entre los manifestantes el problema era, unánimemente, el precio de la uva. José María, de Yécora, señalaba que "esto nos lleva a la ruina a todos. Tienen que poner un precio que nos deje vivir y que debería ser de 0,70 para arriba.