laguardia. La evolución de la maduración de las uvas del rioja continúa dentro de parámetros de normalidad, aunque el cambio climatológico que se acaba de iniciar puede suponer algún retraso, como sería en el caso de Rioja Alavesa, que tiene un microclima muy especial vinculado a la Sierra de Cantabria.
De momento, tras el primer control realizado en Rioja Baja el 30 de agosto, el Consejo Regulador ha extendido esta semana el seguimiento de maduración de la uva a las subzonas Rioja Alta y Rioja Alavesa, obteniendo como resultado más significativo que la evolución de la maduración es excelente en el conjunto de la Denominación, lo que permitiría a fecha actual hablar de unas magníficas expectativas de calidad para la uva.
Tanto de la maduración alcohólica como fenólica de la uva sigue desarrollándose de forma correcta y dentro de la normalidad en cuanto a fechas. De acuerdo con los datos obtenidos de los análisis de las muestras recogidas por los veedores del Consejo en este segundo control realizado este lunes, cabe destacar como aspecto significativo el buen estado vegetativo y sanitario del viñedo.
En Rioja Alavesa las muestras han sido tomadas en los parajes Miralobueno y La Costera, de Lapuebla de Labarca; Buenacerrada, en Samaniego; Entradillas, en Laguardia; paraje El Prado, de Elciego; Larrazuri, de Labastida; Carra Logroño, en Elvillar, y El Canal, en Baños de Ebro. El boletín de resultados publicado por el Consejo especifica la localidad y paraje en que ha sido tomada cada una de las muestras para que, además de la variedad, altitud y año de platanción del viñedo, cada viticultor establezca una comparación con sus propios terrenos.
