Vitoria. La mayoría de los cotos de caza alaveses carecen de la vigilancia que deberían prestarles los guardas. Un hecho que se da en 123 de los 148 lugares vedados que están controlados por la Asociación de Cotos de Caza de Álava (ACCA), ya que desde hace 13 meses sus trabajadores secundan una huelga por la falta de un acuerdo para la firma de un convenio que mejore sus condiciones.
Pero no sólo los cazadores que tienen licencia podrían atrapar especies protegidas o excederse de número con las permitidas. La falta de guardas, podría ser aprovechada por los furtivos durante las cuatro próximas semanas, ya que el pasado domingo se abrió la veda que durará hasta el próximo 12 de septiembre. Es por ello que la asociación Ekologistak Martxan exigió ayer a la Diputación que prohíba perseguir animales en aquellos lugares privados que no tengan garantizada el servicio de vigilancia. "La Norma Foral de Caza de Álava establece la obligatoriedad de dotar al coto de la guardería, durante el período de vigencia de la temporada de caza".
El colectivo ecologista tampoco está de acuerdo con la decisión foral de movilizar sus efectivos para asegurarse que los cazadores atrapen las piezas autorizadas para esta época del año. "La responsabilidad de vigilancia recae sobre los titulares del aprovechamiento del coto, y no sería ni ético ni moral, ni legal que funcionarios públicos se encarguen de unas actuaciones que son responsabilidad privada", denuncian desde Ekologistak Martxan.