Vitoria. Nueva alerta activada. La meteorología ha decidido ocupar un papel relevante en este 2010 en el territorio histórico con una sucesión de fenómenos adversos que se recordarán durante mucho tiempo. El último resorte que ha encendido las alarmas llega como consecuencia de la detección de masas nubosas que, en el peor de los casos, se convertirán en fuertes tormentas y en granizadas, sobre todo, en el sur de Álava. Tal es la situación que el Departamento de Interior del Gobierno Vasco ha decidido curarse en salud y encerder el pestillo amarillo, que sólo es superado por el grado naranja en el ranking que avisa de consecuencias potencialmente nefastas ligadas a lluvias, nevadas, ciclones y similares. En concreto, los modelos con los que trabajan los técnicos centraban las posibles precipitaciones para la tarde-noche de ayer y para la jornada de hoy.

En principio, los rectores del Ejecutivo autonómico preveían para ayer al sur de la capital y hasta la sierra de Cantabria fuertes precipitaciones de lluvia y tormentas de granizo. Para hoy, los estudios y las predicciones apuntan en la misma dirección. Es decir, en horario de tarde-noche, las nubes podrán descargar fuertes tormentas que, además, podrían ser de granizo.

Otras alertas Esta circunstancia no es nueva para Vitoria. Precisamente, hace un año la capital vivió (padeció) los efectos de una granizada histórica que destrozó miles de coches, persianas, tejados, farolas y cultivos de todo tipo. Además, en el presente mes, Interior ya ha activado la alerta naranja tras la detección de una tormenta perfecta que descargó fuertes precipitaciones que se dejaron notar, sobre todo, en Bizkaia, donde ríos como el Nervión estuvieron a un palmo de desbordarse a su paso por Bilbao.