madrid. Los conductores que conduzcan en España con carnés expedidos en otro países y cometan una infracción se exponen no sólo a una multa económica sino también a perder puntos e incluso a quedarse sin poder circular por el país, según explica la DGT.
Y es que la Ley de Tráfico no hace referencia expresa a los conductores con carnés de otro país. Por ello, la DGT establece que, "para evitar una aplicación del sistema del permiso por puntos de modo que pudiera ser entendida como discriminatoria" a favor de los conductores con un carné de otro país, hay que interpretar la ley de manera que el conductor que cometa una infracción pierda puntos "sin excepción alguna". Además, si un conductor con un carné de otro país agota todo su saldo de puntos, perderá la "validez o eficacia" para conducir en España. Es decir, no se le retirará su carné, pero no podrá conducir más en España hasta que supere una prueba de control de conocimientos, igual que si se tratara de un conductor español.
En caso de que el conductor extranjero disponga de un permiso comunitario, válido para conducir en cualquier país de la UE, y agote sus puntos, se le retirará su carné y se remitirá al Estado que lo hubiera expedido, informándole de que su vigencia ha expirado y de que no se le permite conducir en España.