Vitoria. El Gobierno Vasco prepara una severa Ley Antitabaco que hará prácticamente imposible fumar un pitillo en cualquier espacio público, una norma que vendrá acompañada de otras medidas llamadas a erradicar definitivamente el pernicioso hábito. En ese sentido, la directora de Salud Pública del Ejecutivo autónomo, Mercedes Estébanez, explicó ayer en el Parlamento Vasco que Osakidetza abrirá más de una veintena de consultas de deshabituación tabáquica en los centros de atención primaria vascos.
El Gobierno ha elaborado un estudio, ya prácticamente culminado, en el que ha identificado qué ambulatorios ofrecen ya este servicio y cómo se presta. Ya con toda la información sobre la mesa, se establecerá un protocolo de actuación y se abrirán consultas en las comarcas sanitarias donde el hábito de fumar tiene una mayor presencia. Según explicó Estébanez, aquellos entornos donde hay mayores desigualdades socioeconómicas y culturales presentan mayores consumos de tabaco, y en todas ellas se abrirán estas consultas.
"En las unidades de quintil cinco (el quintil es la quinta parte de una población estadística ordenada de menor a mayor en alguna característica, en este caso el consumo de tabaco), siempre habrá una consulta, y donde hay quintil cuatro también", señaló la directora de Salud Pública. No obstante, aquellos centros de salud donde ya se desarrolla esta experiencia, independientemente de las características de su población, seguirán adelante con la experiencia.
Estébanez señaló que los cursos de deshabituación tabáquica serán impartidos principalmente por personal de enfermería, aunque no se descarta que haya también médicos implicados en el programa. Éste se basará principalmente en sesiones semanales, individuales o de grupo y de carácter psicológico, aunque no se descarta el uso de fármacos. La directora de Salud Pública explicó que se apoyará al fumador mientras se prepara para dejar el hábito, valorando las dificultades y ventajas que su decisión, y también varias semanas después de hacerlo.
Estas consultas no se solaparán, por otro lado, con las terapias que ofrecen organismos como las asociaciones contra el cáncer, que mantendrán sus subvenciones. "Tienen horarios diferentes a los de los centros de salud, e igual hay personas que no pueden ir y les viene bien; vamos a dejar abiertas todas las posibilidades", explicó Estébanez.
La responsable del Ejecutivo compareció en la ponencia de medidas antitabaco del Parlamento, donde explicó que la Dirección de Salud Pública respalda el borrador de la Ley que prepara el Departamento de Empleo y Asuntos sociales.