Vitoria. El protocolo que utiliza la Ertzaintza para atender a las víctimas de malos tratos y luchar contra la violencia machista ha recibido la máxima puntuación entre el casi medio centenar de propuestas presentadas por distintas administraciones españolas en un congreso celebrado en Málaga.
Según ha informado hoy el departamento vasco de Interior, el trabajo desarrollado en este campo fue presentado en las VI Jornadas de Modernización y Calidad en la Administración Local que, bajo el lema "Situaciones difíciles, soluciones innovadoras", se celebraron en Málaga los pasados días 22 y 23 de abril, organizadas por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
En este congreso se presentaron 45 proyectos y programas en vigor, auspiciados por gobiernos autonómicos, ayuntamientos, diputaciones y empresas privadas, para ser evaluados en función de su contenido, resultados, su carácter innovador, su impacto y presentación.
Una vez analizados todos ellos, fue elegido como vencedor del certamen el proyecto del departamento vasco de Interior sobre la gestión de los casos de violencia doméstica y de carácter machista, que busca ofrecer a las víctimas un servicio integral.
Para ello, la Policía vasca mantiene una relación permanente con las instituciones sociales y autoridades judiciales, a las que se comunican los casos de riesgo detectados a través de denuncias o de la propia investigación policial.
A continuación, se establecen los dispositivos de protección en función del nivel de riesgo detectado en cada caso, de forma que en ocasiones la víctima está en contacto permanente con la comisaría más cercana a través de un teléfono móvil, a lo que se suma el control al potencial agresor y la vigilancia para que cumpla las medidas de alejamiento establecidas por el juez.
Además, todas las comisarías de la Ertzaintza trabajan con un protocolo unificado, con el que se trata de garantizar que las víctimas sean informadas correctamente de sus derechos.
El sistema se complementa con un proceso de formación de los ertzainas para que conozcan mejor las características de este tipo de violencia, sus aspectos sociológicos y las circunstancias psicológicas de víctimas y agresores, e incluso se hacen encuestas a las víctimas para conocer si están satisfechas con la atención recibida.
Este reconocimiento del trabajo policial en esta materia se suma a otros obtenidos hasta ahora por este protocolo de trabajo, que se ha convertido en un referente para otras policías, incluso de otros países, que han reproducido el sistema vasco.