vitoria. Aumentar la cualificación de los empleados en el comercio minorista es uno de los objetivos del Plan de adaptación del comercio 2015 del Gobierno Vasco. Algo crucial para saber cuáles son las estrategias empresariales más competitivas, que logren la supervivencia del negocio y más aún en el actual contexto económico. Si bien en Álava, el nivel de formación de los gerentes de los comercios minoristas es de grado medio, ya que un 45,1% de personas tiene acabado el equivalente a Bachiller o FP, a ellos le siguen los de escasa formación. Una de cada cuatro de las personas gestoras ha realizado estudios primarios o carece de ellos, mientras que el colectivo más reducido es el universitario. De estos últimos, llama la atención que Álava tiene de media, el mayor nivel educativo en materia universitaria en la CAV, si bien su cifra de 20,6% no es para lanzar cohetes, ya que le sigue muy de cerca Bizkaia con su 24,5%.
Sin embargo, las cifras son desalentadoras si se toma como referencia la formación superior que se tiene en las capitales, de las que Vitoria es la peor parada con un 20,6% de universitarios, frente al 29,6 de Bilbao y el 27,4% de Donostia. Es por ello que el documento del Gobierno Vasco plantea lograr un comercio desarrollado, eficiente y competitivo, con una diversidad de formatos para cubrir las necesidades de los consumidores. Todo ello se enmarcaría por igual en la CAV, ya que se pretende el equilibrio territorial, el fomento de la cohesión urbana y el atractivo de las ciudades. Para ello, una de las estrategias es fortalecer la red de asociaciones empresariales enfocadas a la innovación y a la productividad del comercio. Ésta es la única manera de conseguir que la cualificación de los gerentes garantice un comercio modernizado, caracterizado por estrategias competitivas y la petición de ayudas y medidas mucho más específicas y avanzadas. Son los establecimientos que cuentan con una mayor capacidad para afrontar con éxito el actual contexto económico.
Si se analiza por sectores, la alimentación destaca por ser en el que predominan los gestores con estudios primarios o que carecen de ellos con un 43,6%, mientras que únicamente en este campo el 8,3% posee formación universitaria. La mayoría de sus trabajadores lo consideran un sector de paso, bien para ganarse un dinero extra al mismo tiempo que estudian o para salir de un apuro mientras están en el paro.
En el otro extremo del nivel educativo se sitúa el sector de la salud y la belleza, donde el 54,7% de los gerentes de los negocios son universitarios, seguidos de cerca por los establecimientos dedicados al hogar con un 32%.
"Malas condiciones" Una de las grandes amenazas del minorista pasa por la escasa capacidad de nuevas personas que quieran dedicarse a este sector, al que achacan condiciones laborales poco atractivas, entre las que están las largas jornadas laborales, trabajar los fines de semana o la baja remuneración. Según los datos del Barómetro del Comercio Vasco, el 70,8% de los minoristas realizan jornada continua, lo que significa que de 14.00 a 16.00 horas no realizan el receso habitual para ir a comer. Una de las razones que explica esto es la necesidad de adaptarse a las nuevas demandas y hábitos de vida de la ciudadanía, que reclama una mayor apertura en este tipo de horario para realizar sus compras. Los negocios de belleza y salud son los que aplican en mayor medida el horario continuo, con un 79,6%.