Vitoria. Los cursos de outdoor training que los mandos y los agentes primeros de la Policía Municipal llevan a cabo cada año en Bujedo, alojados en un monasterio y en contacto con la naturaleza, han dado pie a la polémica. La iniciativa, encaminada a fomentar la cohesión en el seno de los grupos de trabajo, ha alimentado la discordia en el Ayuntamiento y los grupos piden explicaciones. Quieren saber por qué el 25% de una ayuda en principio destinada a costear la formación de los 3.200 funcionarios que hay en el entramado municipal ha ido a parar a un programa exclusivo para 24 personas. Ayer le tocó el turno de respuesta al concejal de Seguridad Ciudadana, José Manuel Bully, quien tras mostrarse orgulloso de la gestión realizada por el Ayuntamiento para traer a coste cero este curso, ya que es financiado a través de una ayuda estatal del Instituto Nacional de Administraciones Públicas, INAP, señaló que se trata de un asunto competencia del área de Función Pública. El próximo concejal en aportar información será Joaquín Esteban.

Tal y como informó el lunes DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, cada año un grupo de oficiales, suboficiales y agentes primeros se desplaza durante un fin de semana a la localidad burgalesa de Bujedo para participar en un curso de formación en técnicas de cohesión. Un programa desarrollado por la firma Campobase que busca mejorar el trabajo en equipo y que contempla el desarrollo de actividades en la naturaleza.

El coste de la iniciativa, que incluye el alojamiento, la manutención y las prácticas al aire libre, fue, en 2008, de 11.876 euros que el Ayuntamiento de Vitoria pagó de las arcas municipales. En aquella ocasión, el número total de alumnos fue de 16. En 2009, el precio ascendió a 20.834 euros y el número de participantes se elevó a 24. Sin embargo, en esta ocasión el montante se restó de los 83.783 euros que el INAP había concedido al Consistorio para llevar a cabo planes de formación. Lo que no entiende la oposición es que la cuarta parte de esta ayuda se haya dedicado a 24 personas, cuando hay 3.200 funcionarios en Vitoria. Ayer, la concejala del PP Marian Castellanos, puso de manifiesto su disconformidad con la medida y aseguró que esta política de actuación ahonda el malestar existente en la plantilla de Agirrelanda.

Ainhoa Etxebarria, del PNV, insistió en que no puede ser que siempre sea la cúpula de la Policía, en este caso mandos y agentes primeros, los que se beneficien de la formación de mayor calidad. "Sobre todo -recordó- si tenemos en cuenta que el 60% de los mandos está en comisión de servicio y no es titular de la plaza". "Falta organización", apostilló.

Antxon Belakortu, de Eusko Alkartasuna, se mostró "preocupado" de que el gabinete Lazcoz, "en un momento en el que dice que hay que controlar el gasto corriente dedique 20.000 euros de una ayuda a pagar un curso que es de formación porque está cogido con pinzas". "Estas no son maneras", señaló.

El portavoz de ELA, Roland Estébanez, subrayó su desacuerdo con que se emplee dinero público para este tipo de cursos "que solo sirven para que los mandos pasen el fin de semana poniendo a parir a la dirección y a jefatura". "Si la intención es hacer grupo no hay necesidad de enviarlos a pensión completa a ningún sitio. Hay otras formulas como confiar en ellos como estructura, apoyarles y aceptar sus ideas y propuestas que propongan", afirmó.

La responsable del Sindicato Vasco de Policía, SVPE, señaló por su parte que mientras unos mandos le han dicho que se trata de un buen curso, otros le han comunicado justo lo contrario. "Lo importante es saber si da resultados positivos y si luego son aplicados al grupo. Si no es así, no sirven y las partidas deberían aplicarse de otra manera"