MADRID. El incremento del sobrepeso en la población española está aumentando los índices de disfunción sexual, según datos del Instituto de Medicina Sexual dados a conocer ayer por su director, el doctor Mariano Rosselló de la Clínica Rotger.

Con motivo de la Semana Europea de la Salud Sexual, que se celebra desde el 8 y que culmina el día de los enamorados, el 14 de febrero, Rosselló ha expuesto diversas investigaciones que revelan que las personas con sobrepeso tienen el doble de riesgo de presentar disfunción eréctil y las obesas son veinticinco veces más propensas a sufrir problemas sexuales que aquellas que tienen un peso normal. Asimismo el sobrepeso afecta a la autoestima y al deseo sexual de las personas pero lo hace y se manifiesta de manera diferente en hombres y mujeres, de modo que los varones son más propensos a sufrir de impotencia sexual y las féminas de falta de deseo, de inhibición de la libido. Rosselló indicó que el 68% de las obesas padecen de insatisfacción sexual, mientras que por contra sólo el 46,3% de las mujeres de peso normal presentan este problema. "Disponemos de múltiples evidencias de que los pacientes que sufren problemas de peso desarrollan dificultades considerables que afectan no sólo a la comunicación con sus parejas, en lo relativo a sentimientos y necesidades, sino también a una mayor o menor satisfacción posterior a las relaciones sexuales", señalaba este urólogo y andrólogo.

Un estudio portugués publicado en noviembre en la revista Journal of Sexual Medicine advertía de que, a medida que crece la incidencia del síndrome metabólico, la enfermedad ligada al sobrepeso, "más individuos podrán experimentar disfunción sexual".

Unos 6 millones de españoles mayores de 18 años, el 17%, tienen problemas de obesidad, casi un 2 % más que en 2008 , que era del 15,6 %.

Un 36,6% tiene sobrepeso, un 1% más que el año anterior, 37,8%, según la última Encuesta Europea de Salud realizada en 2009. Un trabajo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sao Paulo, pendiente de publicación, ha concluido que los hombres que sufren un sobrepeso considerable tienen posibilidades muy altas de sufrir una inminente disfunción eréctil. En el caso de las mujeres, según los datos recogidos por el doctor Shah de la Universidad de San Luis (EEUU) tras diversos estudios, la insatisfacción sexual en las mujeres con sobrepeso es mayor en la posmenopausia, con hiperglucemia relacionada con el sobrepeso. Un estudio del Departamento de Bioquímica y Urología de la Universidad de Boston, publicado en la revista de la Federación Europea de Sociedades Bioquímicas en octubre pasado, demostró que la deficiencia de andrógenos y la disfunción endotelial, ligada a la grasa abdominal, podría ser el vínculo entre obesidad y la disfunción eréctil. Otra investigación de la Universidad de Duke, en Estados Unidos, mostró que el 68% de las mujeres con sobrepeso no se sentía atractiva sexualmente, porcentaje que disminuía considerablemente un año después de emprender una dieta con pérdida considerable de peso.

"Los pacientes obesos nos aseguran que con perder un poco de peso se sienten de diez a veinte años más jóvenes en lo que a vida sexual se refiere", comentaba el doctor Rosselló.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que para disfrutar de una vida sexual completa y para que las personas disfruten plenamente de su vida sexual han de coexistir varios factores tales como la posibilidad de disfrutar de una actividad sexual reproductiva, el ejercicio de la sexualidad sin temores o vergüenzas y finalmente, una actividad sexual libre de trastornos orgánicos, enfermedades o alteraciones que la entorpezcan.