santa cruz de tenerife. Tenerife, la isla más afectada por la tromba de agua que el lunes descargó en Canarias, amaneció ayer cubierta de barro, con cientos de casas, garajes y tiendas anegadas por el lodo, vecinos incomunicados y carreteras cortadas.
Además, la Consejería de Educación, Cultura, Deportes y Universidades del Gobierno de Canarias decidió ayer suspender las clases en todas las islas del Archipiélago. El presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, señaló que, aunque la situación tiende a normalizarse, "no se puede bajar la guardia". Ayer se mantenía el nivel 2 de alerta por lluvias.
Estas fuertes precipitaciones se produjeron, según explicó el consejero de Presidencia del Gobierno de Canarias, José Miguel Ruano, debido a la combinación de fenómenos meteorológicos lo que produjo que la borrasca tuviera una naturaleza "semitropical".
Ruano y el presidente del Cabildo informaron de que durante la noche no se habían producido incidencias graves, salvo el corte de suministro eléctrico y los efectos ocasionados por el fuerte oleaje en las costas del Archipiélago.
Unos 160 vecinos residentes en el barranco de Tahodio, en Santa Cruz de Tenerife, estaban incomunicados en sus casas por las fuertes lluvias, informó el Centro de Coordinación Operativo de Emergencias Municipales.
Más de 25.000 usuarios quedaron el lunes sin suministro eléctrico y durante el día de ayer lo recuperaron más de la mitad. El corte perjudicó a clientes situados en una gran mayoría en Tenerife, pero también en alguna zona de La Gomera, El Hierro y en Gran Canaria.
El Cabildo de Tenerife informó de que se había cortado el tráfico en 12 carreteras de la isla, aunque al cierre de esta edición sólo cuatro permanecían intransitables.
piezas valiosas en peligro La iglesia de la Concepción, la más antigua de Tenerife, fundada en 1499, permanecía ayer inundada y cubierta de lodo, aunque lo peor, según relató su párroco, Mauricio González, era que estaban en peligro ornamentos del siglo XVIII.
Las fuertes lluvias que el lunes cayeron sobre Tenerife inundaron la iglesia hasta medio metro de altura. "Los bancos flotaban, al igual que todos los muebles de la iglesia y poco a poco comenzaron a entrar ramas, hojas y troncos de árboles", explicó el párroco. Fuentes del Centro Meteorológico de Las Palmas indicado que se trata de una borrasca atlántica normal que se desplaza ahora hacia el Golfo de Cádiz.
Rivero, por su parte, afirmó ayer que exigirá al Gobierno central que el Archipiélago disponga de los mejores instrumentos para predecir con la mayor precisión posible fenómenos meteorológicos como el que ha afectado a Canarias en las últimas horas. Señaló que es imprescindible que Canarias, por su situación geográfica, disponga de los mejores instrumentos de predicción que les permita trabajar con tiempo e informar a los ciudadanos de forma adecuada.
No obstante, afirmó que no cree que con instrumentos más precisos se hubiese evitado los efectos que ha tenido esta borrasca sobre las islas, especialmente en Tenerife.