labastida. Un incendio, que se saldó con dos heridos leves, se desató en la madrugada del domingo en un grupo de adosados existente en el lugar conocido como El Canogal, entre el Mesón Jai-Alai y la ikastola de Labastida. Alrededor de las cuatro de la madrugada, los propios afectados fueron los que avisaron a SOS Deiak Álava, después de despertarse sobresaltados y comprobar que la vivienda se encontraba llena de humo. Desde la entidad de emergencias vasca se alertó al Centro de Coordinación Operativa SOS Rioja 112, que fueron quienes enviaron a los Bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento de La Rioja. A ellos se sumaron, posteriormente, los recursos de extinción y los respectivos servicios sanitarios en prevención, así como los de seguridad, desde Vitoria. Tras la extinción del incendio, los medios de CEIS-Rioja pudieron apreciar que los daños se ceñían a la planta baja de la casa, sin afectar al exterior. Fue necesaria la evacuación de las dos personas que estaban en el interior del inmueble y que sólo presentaban afecciones leves. Uno de ellos fue trasladado a un centro sanitario alavés por intoxicación de humos. Los Bomberos de Vitoria fueron los encargados de la revisión posterior del inmueble y labores de prevención de daños.
Las dos personas resultaron heridas leves por inhalación de humos después de que se originase un incendio en la chimenea de la vivienda. Al parecer, el fuego se inició en este punto, ubicado en la planta baja de la vivienda y los inquilinos, tras despertarse sorprendidos por la gran cantidad de humo que llenaba la casa, corrieron a refugiarse en la parte superior. Los Bomberos rescataron a dos personas, que tuvieron que ser evacuadas por inhalación de humo, aunque su pronóstico era leve. El lugar donde se produjo el incendio es una urbanización cerrada, con chalets adosados en un lateral y viviendas y dúplex en los otros, así como una piscina común en el patio interior. Se trata de viviendas de temporada y fines de semana, por lo que, según señalaron los afectados, fue una suerte que el fuego se detectara a tiempo, ya que de los contrario se podría haber propagado a todo el conjunto de viviendas.