El verano y el calor extremo tienen consecuencias fatales para el cuerpo. Una de ellas se puede ver muy bien en las piernas pues, debido a las altas temperaturas, se pueden hinchar y sufrir una sensación de pesadez. Algo que hace más complicado todavía aguantar estos días de época estival.
Si bien es imposible frenar una ola de calor, hay algunos remedios sencillos con los que poder hacer frente a unas piernas agotadas y hasta hinchadas. Para eso,primero es fundamental entender por qué ocurren estas molestias.
El síndrome que aumenta en verano
El calor de estas fechas, sobre todo en los días, unido con pasar muchas horas de pie, puede provocar calambres, picores y otro tipo de dolores. Se puede apreciar en las piernas, que se ven más hinchadas y con más volumen de lo común.
Por lo tanto, vemos que ciertas prendas, como los pantalones, medias,calcetines, bañadores etc., dejan marca al final del día. Es algo que se ve, sobre todo, en la población adulta y que requiere de remedios sencillos para solucionarlo.
Hidratación
La hidratación es fundamental para que las piernas se mantengan libres de peso y dolor. Al contrario de lo que se piensa, esta parte del cuerpo no retiene líquidos, pues esto solo pasa cuando el organismo no ha acumulado agua suficiente para ello.
Dieta
La nutrición tampoco se puede descuidar. Moderar el consumo de sal es un factor clave para que las piernas no se hinchen demasiado. Consumirla en exceso hace más difícil que puedan retener líquidos y aumentar de volumen.
Ejercicios
Una circulación fluida ayuda a que las piernas dejen de hincharse. Para ello, hay ejercicios como tumbarse o sentarse con los pies, o elevar las piernas, que sirven para que la sangre circule mejor por el cuerpo. También podemos recurrir a los masajes, aplicando cremas en las zonas concretas.
Prendas adecuadas
La ropa ajustada ahoga la circulación de la sangre y contribuye a que las piernas se vean más hinchadas. Por eso mismo, vestir prendas holgadas es lo más recomendable, porque también dan una sensación de comodidad que no ocurre con las otras
Otros hábitos que ayudan
Además de las soluciones que hemos repasado antes, también existen otras rutinas como pasear, nadar o hacer ejercicios con pesas, pues tonifican los músculos y las piernas. Asimismo, por el bien del cuerpo, no se aconseja estar demasiado tiempo de pie o sentado.
Por otro lado, las duchas, a ser posible frías, son una opción a tener en cuenta. Favorecen la circulación de la sangre y bajan la hinchazón de las piernas, al igual que activar todo el cuerpo en general.
También se pueden hacer algunos pequeños estiramientos y paseos durante el día para poner en marcha la circulación de la sangre y estirar la musculatura, algo que ayuda a evitar problemas de lesiones y contracturas.
En cualquier caso, cuidar las piernas en estos días de calor veraniego depende única y exclusivamente de cada uno. Por eso mismo, cada persona sabe qué remedios son los mejores para cuidar de su cuerpo.