El Plan de Empleo de la Ertzaintza se desplegará en dos fases hasta 2028, aunque algunos resultados se prolongarán a 2030

El Plan de Empleo de la Ertzaintza desplegará diversas acciones para lograr los 8.000 efectivos hasta 2028, aunque algunos de sus resultados se prolongarán hasta 2030. Las medidas se desarrollarán en dos fases, una de choque para frenar el descenso de profesionales y otra de sostenibilidad para evitar nuevos desequilibrios, según ha explicado el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria.

El consejero ha comparecido este miércoles ante la Comisión de Instituciones, Gobernanza Pública y Seguridad del Parlamento Vasco, para informar sobre el Plan de Empleo de la Ertzaintza, aprobado en julio en la Mesa de Negociación de la Ertzaintza con el apoyo de los sindicatos ErNE, ESAN y SIPE y en noviembre en Consejo de Gobierno.

Junto al viceconsejero de Seguridad, Ricardo Ituarte, y el director de Recursos Humanos, Javier Arrieta, el consejero ha expuesto el plan que persigue "adoptar un enfoque amplio y que la Ertzaintza disponga de una hoja de ruta de desarrollo para los próximos años".

Con el objetivo de alcanzar los 8.000 integrantes, el plan prevé una serie de acciones entre este año 2025 y 2028, si bien, ha precisado Zupiria, algunos de los resultados se prolongarán hasta 2030.

Una vez se llegue a esa cifra, la meta será mantenerla, conseguir una organización adecuada del personal, la consideración de las posibilidades de carrera y formación de los profesionales, y posibilitar procesos de selección y promoción que ahonden en la eficacia, la transparencia y los méritos.

Zupiria ha destacado que el plan es un documento "vivo que deberá adaptarse a las condiciones de la realidad de cada momento" y busca "responder a una demanda importante por parte de la ciudadanía vasca, que es ofrecer un mejor servicio público de seguridad".

"Con este Plan podremos ofrecer más recursos humanos tanto a labores preventivas como reactivas que hagan de la sociedad vasca una sociedad aún más segura y confiable", ha subrayado.

En función de los datos que ha aportado, la plantilla de la Ertzaintza cuenta con un déficit de alrededor de 700 personas y a finales de 2024 se encontraban más de 2.300 puestos de trabajo sin titular adscrito en el total de las categorías, así como más de 1.300 funcionarios de carrera sin adscripción definitiva.

A través del plan de empleo, ha relatado, se ordenarán los procesos de ingreso, ascenso y especialización, de manera que mediante las convocatorias de ascenso y especialización se generarán vacantes en categorías inferiores que permitan sacar plazas en Ofertas Públicas de Empleo. Estas OPE deberán estar "sincronizadas" con las jubilaciones previstas.

También se reordenarán y actualizarán progresivamente la Relación de Puestos de Trabajo, para lo que se realizará un estudio global dirigido a revisar las especialidades actuales e incluir nuevas.

Se actualizará, igualmente, la formación en la Academia Vasca de Policía y Emergencias mediante la modernización de currículos, metodologías, infraestructuras y la plataforma Arkampus, y se establecerá un modelo de planificación para "calendarizar" todos los procesos, coordinar jubilaciones con nuevas promociones y reducir la dependencia de comisiones de servicio y situaciones provisionales.

El Plan de Empleo de la Ertzaintza se llevará a cabo en dos fases, una primera "de choque" (2026-2027) y una segunda de sostenibilidad (2026-2028). En la primera, dirigida a frenar el descenso del número de profesionales y estabilizar la situación, se adoptarán medidas como convocatorias de ascensos inmediatos, procesos de especialización, provisión definitiva de puestos de trabajo, ofertas públicas de empleo, o la reforma de la Academia Vasca de Policía y Emergencias.

En la segunda fase, se buscará "establecer un sistema sostenible y previsible mediante la elaboración de calendarios anuales, evitando nuevos desequilibrios y estabilizando la escala de facultativos y técnicos".

Según ha precisado Zupiria, en 2026 el presupuesto vinculado a los compromisos del Plan de Empleo es de 23,6 millones, presupuesto que se aprobará este jueves en el Consejo Rector de la Academia Vasca de Policía y Emergencias.

Así, el próximo año Arkaute podrá empezar a desarrollar parte del plan mediante la convocatoria, selección, formación y prácticas "in job" de los procesos de ascenso a los puestos de intendente, comisario, subcomisario, oficial, suboficial y agente 1º de la Ertzaintza, o diferentes fases de las convocatorias 4ª, 5ª, 6ª, 7ª y 8ª conjuntas de la Euskal Polizia.

Otras de las medidas son la convocatoria de la promoción 35 de la Ertzaintza de 150 plazas, ampliable en función del resultado de la convocatoria de la promoción anterior que contemplaba 473 plazas. Esta convocatoria, ha explicado el consejero, tiene la inscripción abierta hasta el día de Navidad y abordará en marzo su siguiente fase.

También se cita las especializaciones en Seguridad Vial, Investigación Criminal, Protección, Desactivación de explosivos, Brigada Móvil, Guía Canino, con el objetivo de ir adscribiendo agentes a especialidades y generar plazas básicas; la convocatoria, selección formación y prácticas de la modalidad facultativa y técnica; la convocatoria de 52 plazas de la Escala de Facultativos y Técnicos que se ofertarán por medio de promoción interna y turno libre; y la OPE de 2025, aprobada este martes, con 430 plazas.

En palabras del consejero, el objetivo final del plan es "resolver el déficit de personal que ha venido produciéndose durante años, modernizar la estructura y procesos de la Ertzaintza y asegurar una planificación estable de futuro".

CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN

Desde los grupos de la oposición, el parlamentario de EH Bildu Gorka Ortiz de Guinea ha cuestionado que se plantee la cifra de 8.000 ertzainas como un "número mágico", pese a que han pasado 20 años desde que se pactó. "¿Se imaginan que Mercedes, CAF o Talgo hubiesen hecho un plan en el año 2005 que le marque los números de trabajadores para 2025?", ha señalado.

Por ello, ha apostado por analizar "con rigor" y actualizar el número de ertzainas necesarios "en base a la realidad" actual, teniendo en cuenta las nuevas necesidades en materias como ciberdelincuencia, violencia machista o delitos medioambientales.

Desde el PP, Ainhoa Domaica ha considerado que el plan es "un castillo de naipes, con importantes amenazas judiciales, con rebajas de las exigencias formativas y de la excelencia, con eliminación de pruebas físicas, sin profesores suficientes y sin las instalaciones necesarias".

"Su plan de empleo hace aguas desde el minuto uno", ha advertido al consejero la parlamentaria del PP, que ha defendido "una Ertzaintza del siglo XXI" y ha augurado que el plan no se va a poder cumplir.

La parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha expresado sus "dudas" sobre el plan de empleo y, en este sentido, ha recordado que se han asumido nuevas competencias, como la vigilancia en Puertos este mismo año, que requieren "personal formado".

Desde los grupos que integran el Gobierno Vasco, el parlamentario del PNV Jon Andoni Atutxa ha reivindicado que se trata de un plan "riguroso" que contempla "múltiples facetas" para alcanzar la cifra de 8.000 ertzainas fijada "a día de hoy", en tanto no se adopten "otros acuerdos" o se observen "otras necesidades".

Aunque ha admitido que puede encontrarse "piedras en el camino", ha remarcado que responde al "acuerdo con la mayoría sindical en la Ertzaintza". Por su parte, la parlamentaria del PSE-EE Miren Gallastegi ha considerado que se ha presentado un plan de "interesante, complejo y ambicioso" para afrontar "un proceso que no carece de dificultades", y que cumple con los mandatos de la Cámara y con el acuerdo de Gobierno entre su grupo y el PNV.