Los grupos del Parlamento Vasco han evidenciado este jueves, en el transcurso de una moción de EH Bildu, sus diferencias respecto al contenido, los ritmos y el ámbito en el que debe acometerse el debate sobre la reforma del sistema fiscal vigente en Euskadi.

El pleno de la Cámara ha vuelto a debatir sobre este asunto a propuesta de EH Bildu, que ha presentado una moción que ha obtenido el apoyo de Elkarrekin Podemos-IU, pero que ha sido rechazada al recibir el voto en contra del PNV, PSE-EE, PP+Cs y Grupo Mixto-Vox.

En su moción, EH Bildu planteaba que es "urgente" acometer un debate "público, amplio y ordenado" sobre el nuevo modelo fiscal, con el fin de "abordar los retos de la década" y de "profundizar en la  progresividad y la distribución de la riqueza".   

DEFLACTACIÓN "REGRESIVA"

La coalición proponía que, a la espera de dicho debate, se adoptaran medidas "inmediatas" para proteger a la población. En su moción, EH Bildu expresaba su "rechazo" a la deflactación en el IRPF acordada por las diputaciones forales, al considerar que "además de ser regresiva, tiene un impacto muy limitado en los sectores más afectados por la crisis".

Asimismo, en la moción se instaba al Gobierno Vasco y a las diputaciones forales a que pusieran en marcha, de forma urgente,  "fuertes deducciones en el impuesto sobre la renta", unas deducciones que serían "progresivas", con el objetivo de "proteger eficazmente las rentas bajas y medias más afectadas por la crisis".

En el transcurso del debate, la parlamentaria de EH Bildu Leire Pinedo se ha felicitado por el hecho de que tras muchas "excusas", el Gobierno Vasco haya anunciado ahora que iniciará una reflexión sobre una reforma tributaria en enero de 2023. No obstante, ha lamentado que dicha reflexión se vaya a limitar a un debate entre el PNV y el PSE, que gobiernan el Ejecutivo vasco y las diputaciones forales.

Desde el PNV, Alaitz Zabala ha recordado que el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha anunciado que en enero se iniciará una reflexión sobre un posible cambio de las normas fiscales en el seno del Órgano de Coordinación Tributaria. Además, ha subrayado que cualquier reforma estará orientada a "mantener la competitividad, contribuir a actividad económica y el empleo, y a garantizar las políticas sociales".

La parlamentaria del PSE-EE Sonia Pérez se ha mostrado partidaria de que el debate sobre la reforma tributaria no esté condicionado por la situación de "excepcionalidad" que se está viviendo desde el inicio de la pandemia. Además, se ha desmarcado del modelo fiscal de PP+Cs, al que ha reprochado que al reclamar bajadas de impuestos generalizadas "se les olvida decir que sin impuestos no hay sanidad ni educación públicas, ni políticas sociales".   

"DEMAGOGIA"

Por parte de Elkarrekin Podemos-IU, David Soto también ha criticado la "demagogia" de PP+Cs en materia de fiscalidad. Además, ha reprochado a la coalición de Partido Popular y Ciudadanos que apele constantemente al "rigor" y la "seriedad", para luego dedicarse a "caricaturizar" a los partidos de izquierdas en materia tributaria.

El parlamentario de PP+Cs Luis Gordillo ha reiterado la petición de su grupo de rebajar la presión fiscal para "no penalizar" a las familias y la generación de riqueza. "El modelo bueno es el nuestro", ha asegurado, tras lo que ha rechazado las propuestas destinadas a "estrujar" los recursos de los ciudadanos. La única representante del Grupo Mixto-Vox, Amaia Martínez, no ha participado en el debate.