El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, ha defendido la profesionalidad con la que se decide sobre las solicitudes de progresión de grado presentadas por los presos de las cárceles de Euskadi, ya que siempre se actúa con criterios técnicos y argumentos jurídicos.
Así se ha expresado Zupiria tras la reunión del Consejo de Gobierno al ser preguntado por la decisión de la Audiencia Nacional de revocar el tercer grado que el Ejecutivo vasco había concedido al preso de ETA Mikel San Argimiro, que ya ha vuelto a ingresar en la cárcel de Martutene, en Donostia.
Esta revocación se produjo además pocos días después de la de Xabier Atristain, otro preso de ETA que volvió el pasado 14 de octubre a la prisión donostiarra al estimar igualmente el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria otro recurso de la Fiscalía.
Zupiria ha "defendido" la actuación del Gobierno vasco que hace un año asumió la gestión de las cárceles vascas y ha asegurado que adopta todas sus decisiones según criterios técnicos y argumentos jurídicos, aunque ha reconocido que en estas cuestiones "la última palabra la tiene la Justicia".
El portavoz del Ejecutivo ha avanzado además que en adelante se continuarán analizando las peticiones de progresión de grado "de forma profesional" y que estas se concederán cuando así se estime y se denegarán cuando no se cumplan los requisitos.